miércoles, 16 de septiembre de 2020

17.- EL LEGADO ANDALUSÍ - 6 -

Fue necesario que transcurriese un siglo desde el desembarco musulmán en la península, para que comenzara a despuntar cierta vida cultural en el invasor. Los primeros en llegar eran guerreros y difícilmente podrían aportar estímulos culturales. Además la cultura existente en el territorio, la visigoda, se fue restringiendo a medida que aumentaba la musulmana. Hasta quedar confinada a reductos, los llamados mozárabes. La lengua árabe sustituyó a la latina, en las zonas ocupadas. Las iglesias se convirtieron en mezquitas, en vez de rezar mirando a Roma se miró a La Meca, y la Hispania de romanos y visigodos empezó a llamarse Al Andalus ya en monedas acuñadas en el año 716. Al comienzo la actividad de su cultura se redujo a los conocimientos necesarios para la vida cotidiana o actividades mercantiles.
Esta situación contrasta con el altísimo nivel cultural que se encuentra en los siglo IX y X, que fue el reflejo del impulso en el occidente musulmán del califa Al-Mansur, en el siglo VIII a todas las ramas del saber. Córdoba se convirtió entonces en uno de los focos culturales más brillantes del mundo. Sabios de religiones y culturas diversas, musulmanes, cristianos y judíos convivieron en armonía y se fundieron en una fecunda simbiosis cultural. Pero, lo que eran el pueblo, esa idea de que había una Al Andalus tolerante y feliz, llena de poetas y gente culta, donde se bebía vino, tolerancia religiosa y las señoras eran más libres que en otras partes, no es verdad. En otro orden de cosas, durante siglos fueron frecuentes las alianzas entre cristianos y musulmanes, con matrimonios mixtos y otros convenios, hasta el extremo de que muchos reyes y emires de uno y otro bando tuvieron madres musulmanas o cristianas; no esclavas, sino concertadas en matrimonio a cambio de alianzas y ventajas territoriales. Todo esto fue creando una tierra de nadie peligrosa, despoblada, que se extendía hasta el valle del Duero, en la que las familias de colonos cristianos pobres se instalaban poblando por su cuenta y riesgo. Se unían para defenderse con fortificaciones y a su manera empezaron una reconquista sin imaginar lo importante que era aquello. Y desde la Rioja se comenzó a extender una rica lengua, que hija del latín, no dejó de absorber palabras árabes y enriquecerse de los griegos y demás. Cómo estarían las cosas reconquistadoras de poco claras por ese tiempo, que el primer rey cristiano de Pamplona del que se tiene noticia, Íñigo Arista, tenía un hermano carnal llamado Buza que era caudillo moro, y entre los dos le dieron otra soba después de Roncesvalles a Carlomagno.
En el siglo XI se produce la desaparición del califato cordobés que conllevó la división política de Al-Ándalus en núcleos independientes, los reinos de “Taifas”, (Banderas). Cada uno de sus reyes dominaba en provecho propio, el descontento de la población fue en aumento por el incremento de los impuestos y tributos que debían pagar a los reyes cristianos para su protección. Los reinos de Taifas no dominaban un cuerno, pagaban impuestos a los cristianos para poder seguir establecidos. Cuando todo el mundo dice que los árabes estuvieron es España 800 años, o no saben contar o desconocen la historia. Dominar, lo que se llama dominar, digamos desde el 714 al 1085 año en que se reconquista Toledo. Al principio la estructura económica de Al-Andaluz se basaba esencialmente en la agricultura y ganadería. Aunque aumentaba la producción artesanal y se incrementaba el comercio. En contacto con los principales centros intelectuales del Islam, se acometió desde comienzos del siglo X la elaboración de creaciones artísticas e investigaciones científicas. Sus resultados fueron exportados a los reinos cristianos. España es heredera de gran patrimonio artístico andaluz, que se conserva con orgullo.
Se confeccionaron diccionarios y se usaron leyes gramaticales. Se desarrolló una técnica para la elaboración del cristal. La numeración arábiga, de origen indio, llegó poco después de ser adoptada en Oriente en el siglo IX, y de allí pasó al Occidente cristiano. Esto permitió el uso de la aritmética comercial, la geometría y la agrimensura. La astronomía, siempre ligada a la astrología y siempre ha resultado difícil desligar ambas materias antiguamente. También se desarrollaron la medicina y la botánica, la zoología y la mineralogía, todas ellas relacionadas por la alquimia. La filosofía andalusí provenía de sus raíces con el mundo cultural bizantino. La importancia de la poesía era considerada, junto con el lenguaje la principal expresión estética.
Pero la mejor expresión de arte que nos han dejado ha sido la arquitectura. La pobreza de los materiales se disimulaba con una profusión decorativa que confiere gran vistosidad y sensación de riqueza. La piedra se utilizó poco y sí en cambio el ladrillo y la mampostería. Ocasionalmente el adobe. Pilares de ladrillos revestidos de mosaicos y estucos. El arco fue el de herradura, también con variantes hasta entrar en un cierto barroquismo. Cubiertas de madera, bóvedas de crucería sin clave central. La decoración no deja espacio sin decorar. La mezquita es el edificio más característico de la arquitectura islámica. Generalmente se abre a un patio con una fuente. El edificio fundamental es la mezquita de Córdoba. Fue construida en el 786 sobre una iglesia visigótica de San Vicente. En el periodo de las segundas taifas lo llena en el terreno artístico la Granada nazarí con la culminación en el siglo XIV, época de la construcción de la Al-hambra. Es un conjunto de edificios y jardines levantado en los siglos XIII y XIV sobre una antigua fortaleza. De gran belleza, es objeto de otro artículo sobre el tema.

BATALLA DE AYACUCHO

Ayacucho, 9 de diciembre de 1824 Es considerada la última batalla y desencadena el principio del fin del Imperio Español en América. En agos...