jueves, 6 de junio de 2024

EL ISLAM EN HISPANIA

Es una religión monoteísta abrahámica fundamentada en las enseñanzas del profeta Muhammad ibn Abdullah (570-632 d. C.).
De las tres religiones monoteístas del mundo, el Islam es la que apareció más tarde, concretamente en el siglo VII. 
Mahoma con 25 años mejorará su posición social como resultado de su matrimonio con Jadiya, un viuda rica mayor que él. Se cree que en alguna de sus expediciones comerciales a Siria y a La Meca, tuvo contacto directo con cristianos y judíos, puesto que le gustaba reflexionar sobre lances religiosos. Hacia el año 613 empezó a predicar. Estas revelaciones serian recogidas a lo largo de su vida y agrupadas "shuras" o capítulos. La totalidad de estas forman el Corán, libro sagrado de los musulmanes. De una manera bastante rápida fue consiguiendo adeptos. En todo caso, el Islam se expandió  muy rápidamente y en muy pocos años como una mancha de aceite  aprovechando las debilidades de una cristiandad que no acababa de despuntar después de la caída del imperio romano y donde tanto en Roma como en Bizancio andaban a la greña, agotados y donde el campesinado se moría a base de impuestos y solo una élite vivía como oligarcas.
No obstante tuvieron enemigos. Los musulmanes hicieron frente al ataque de los mecanos en la batalla de Badr (624 d. C.), en la que poco más de 300 soldados desbandaron un ejército de alrededor de 1000 mecanos. Algunos le acreditan la victoria a la intervención divina y otros al genio militar de Mahoma.
Tras la victoria de Badr, los musulmanes dejaron de ser un pequeño grupo de seguidores de una nueva religión, para convertirse en una fuerza militar de consideración. Se sucedieron múltiples enfrentamientos entre musulmanes y otras tribus árabes en los que los primeros tuvieron éxito.



Durante el año 630 d. C. se abrieron las puertas de La Meca para recibir al ejército musulmán, la ciudad de donde una década antes habían huido llenos de pánico. La Meca se encontraba ahora en manos musulmanas, y contra todas las expectativas, Mahoma le otorgó la amnistía a todos los que se rindieron y aceptaron su fe.
El Islam como religión no se empezó a propagar hasta la fundación de Bagdad en el 762. Prueba de ello es que Juan Damasceno, el último cristiano en aquella zona no menciona ni una sola vez la religión islámica. Esto es una línea de investigación muy interesante. 
El islam prometió igualdad, protección, eliminar la corrupción material y moral y lo consiguió con diplomacia después de los primeros cien años.
En el 711 quien entró en la Península ibérica no fue una cultura con una religión determinada, sino una cultura que aprovechó las debilidades de un territorio para expandirse. Lo normal en aquella época. Los primeros códices europeos que hablan de la normativa  musulmana datan de finales del siglo IX ( crónicas de los francos). Eso quiere decir que aún por aquel entonces  nadie sabía muy bien nada sobre el islam como religión. Antes de morir Carlomagno, en el s. IX , anduvo interesado en quieres eran aquellas gentes y quien era Mahoma para implantar en la Europa cristiana  el mismo modus operandi, por decirlo de alguna manera para  unificar la cristiandad. Hay estudios muy interesantes sobre el tema.


Lógicamente nos han dejado un  legado, no tan amplio  como el romano ni muy escaso como los bizantinos.
Ser musulmán en aquel final de la Antigüedad tardía, siglos oscuros, era fácil .Mahoma es el sello de los profetas: Moisés y Jesús, con él se acaban “las revelaciones", él va a poner orden en una sociedad que no quiso escuchar a Moisés y a Jesús. A cambio solo pide cumplir los 5 pilares del Islam nada difíciles : La declaración de fe, la oración, la limosna, el ayuno y la peregrinación. 
Para la invasión de la península ibérica los musulmanes calcularon las posibilidades y las riquezas que podrían obtener para lo que mandaron una expedición a la península y quedaron maravillados. Por lo que noticiados los árabes se pusieron a la preparación de invadir la península.
Los textos musulmanes que hablan de la conquista de la península en su conjunto son fuentes escritas más de un siglo y medio después de los hechos. 
Los textos cristianos son irrelevantes, salvo la Crónica mozárabe de 754, escrita unos 30 años después de terminada la conquista. 
Los musulmanes había invadido y conquistado anteriormente el actual Magreb, la península arábiga, Siria, Egipto, Libia, la Mesopotamia y Persia
La conquista del reino visigodo en nuestra península requirió de campaña y muchos esfuerzos militares y también de pactos con judíos y nobles visigodos, a cambio de un tributo la mayor de la veces. 

REINOS DE TAIFAS EN EL 1037 
Es evidente que el reino visigodo atravesaba una época de debilidad causada por el empobrecimiento del pueblo y as luchas fratricidas  que debilitaban el poder real. Les vinieron de perlas a los musulmanes las calzadas romanas que les facilitaron los desplazamientos del ejército. 
Para finales del siglo VII el reino visigodo había perdido alrededor de un 25% de la población. Años de peste, sequía, hambre y otras causas indirectas, durante los reinados de Witiza y de Rodrigo. 
Las luchas nobiliarias fueron un fator habitual entre los visigodos, que muchos reyes murieron asesinados. 
La división en dos facciones de nobles en esos años fue determinante y es posible que haya sido parte de los witizanos los que favorecieron a los musulmanes incluso como aliados. 
Los judíos no se quedaron ajenos, al contrario, viéndose favorecidos seguramente por un mejor trato que con los visigodos, (no olvidemos que habían sido expulsados un siglo antes), siendo numerosos en la Bética, en la Galia Narbonense y junto al Mediterráneo, además habitaban en ciudades y pueblos como Tarragona, Elche, Córdoba Zaragoza, Sevilla, Málaga e incluso en Toledo, entre otras. 
Los judíos eran en su mayoría conversos forzados,  pero falsos cristianos por lo que eran castigados salvo algún noble que los defendían como Isidoro de Sevilla. Los cristianos del norte de África que habían huido, informaron del apoyo dado a los musulmanes por parte aquellos judíos. 
También sucedía que en el norte de África había bereberes que profesaban el judaísmo por mestizaje, los cuales dieron apoyo a los musulmanes en su conquista. 
El reino visigodo cubría el territorio peninsular y la Septimania en el sur de Francia. Baleares estaba bajo soberanía bizantina. Más adelante pasaría a depender  pasar después a depender del reino franco (798) para ser defendidos de los musulmanes. 
Lo cierto y verdad es que en el Califato Omeya venían teniendo planes de conquista para la península desde hacía unos cuantos años, dada la información que manejaban de un reino con problemas, empobrecido y con luchas fratricidas. 
Al conquistar Marruecos al final de 670, sabemos de una primera incursión musulmana en las costas del levante. Fueron ocupando de a poco el norte de África que se culminó en el 705 al conquistar Tánger. Cartago ya había sido arrasada en el 696. Luego conquistaron Ceuta en el 710. 
En el año 711 el rey visigodo, don Rodrigo, estaba luchando en el norte y muchos nobles visigodos no le eran fieles. La situación para los musulmanes se mostraba propicia. Con lo cual se lo tomaron con interés y prepararon la invasión estableciendo acuerdos y consiguiendo apoyos, sobre todo de los judíos, que veían la posibilidad de un mejor trato y conveniencia de negocio que con los cristianos, y sectores sociales visigodos descontentos por los privilegios de las clases altas.
Es posible que hayan sido los barcos de don Julián los que ayudaron a cruzar el estrecho a las fuerzas invasoras. Entraron por Gibraltar, con un ejército de 12.000 hombres, la mayoría bereberes, y desembarcaron a las órdenes de Tariq-ibn Ziyad que era el gobernador de Tánger. De forma y manera que cuando el rey Rodrigo llegó con su ejército en plan a ver qué diablos está pasando aquí, era tarde y en la batalla famosa batalla cerca del río Guadalete, del cual toma su nombre dicha batalla, allí perdió Rodrigo la batalla y la vida.
Ante los enfrentamientos internos de los propios visigodos, la falta de auténtica resistencia y los apoyos, el avance musulmán fue bastante sencillo.
Los largos gobiernos de Abd al-Ramán III y de su hijo Al-Hakan II (961-976)supone el apogeo del Califato cordobés. La llegada del Almanzor a base de éxitos militares y crueldad sanguinaria, hizo que se hiciera con el poder prácticamente, pero al morir éste en el 1002, poco tiempo duró el Califato, desmoronándose en el 1031 en pequeños reinos de Taifas, que terminaron siendo vasallos de los reinos cristianos. Para mediados del siglo XIII ya solamente quedaba el reino nazarí de Granada, vasallo también de la Corona de Castilla-León. Al dejar de pagar los impuestos, poco después comenzó la guerra que duró diez años y como todos sabemos terminó en el 1492, despareciendo así los reinos musulmanes en la Península. 
Por lo que no es cierto que el Islam dominaran aquí durante 800 años. 
yor que él. Se cree que en alguna de sus expediciones comerciales a Siria y a La Meca, tuvo contacto directo con cristianos y judíos, puesto que le gustaba reflexionar sobre lances religiosos. Hacia el año 613 empezó a predicar. Estas revelaciones serian recogidas a lo largo de su vida y agrupadas "shuras" o capítulos. La totalidad de estas forman el Corán, libro sagrado de los musulmanes. De una manera bastante rápida fue consiguiendo adeptos. En todo caso, el Islam se expandió  muy rápidamente y en muy pocos años como una mancha de aceite  aprovechando las debilidades de una cristiandad que no acababa de despuntar después de la caída del imperio romano y donde tanto en Roma como en Bizancio andaban a la greña, agotados y donde el campesinado se moría a base de impuestos y solo una élite vivía como oligarcas.
No obstante tuvieron enemigos. Los musulmanes hicieron frente al ataque de los mecanos en la batalla de Badr (624 d. C.), en la que poco más de 300 soldados desbandaron un ejército de alrededor de 1000 mecanos. Algunos le acreditan la victoria a la intervención divina y otros al genio militar de Mahoma.
Tras la victoria de Badr, los musulmanes dejaron de ser un pequeño grupo de seguidores de una nueva religión, para convertirse en una fuerza militar de consideración. Se sucedieron múltiples enfrentamientos entre musulmanes y otras tribus árabes, en los que los primeros tuvieron mucho éxito. Durante el año 630 d. C. se abrieron las puertas de La Meca para recibir al ejército musulmán, la ciudad de donde una década antes habían huido llenos de pánico. La Meca se encontraba ahora en manos musulmanas, y contra todas las expectativas, Mahoma le otorgó la amnistía a todos los que se rindieron y aceptaron su fe.
El Islam como religión no se empezó a propagar hasta la fundación de Bagdad en el 762. Prueba de ello es que Juan Damasceno, el último cristiano en aquella zona no menciona ni una sola vez la religión islámica. Esto es una línea de investigación muy interesante.
El islam prometió igualdad, protección, eliminar la corrupción material y moral y lo consiguió a base de diplomacia después de los primeros cien años.
En el 711 quien entró en la Península ibérica no fue una cultura con una religión determinada, sino una cultura que aprovechó las debilidades de un territorio para expandirse. Lo normal en aquella época. Los primeros códices europeos que hablan de la normativa  musulmana datan de finales del siglo IX ( crónicas de los francos). Eso quiere decir que aún por aquel entonces  nadie sabía muy bien nada sobre el islam como religión. Antes de morir Carlomagno, en el s. IX , anduvo interesado en quieres eran aquellas gentes y quien era Mahoma para implantar en la Europa cristiana  el mismo modus operandi, por decirlo de alguna manera para  unificar la cristiandad. Hay estudios muy interesantes sobre el tema.
Lógicamente nos han dejado un  legado, no tan amplio  como el romano ni muy escaso como los bizantinos.
Ser musulmán en aquel final de la Antigüedad tardía, siglos oscuros, era fácil .Mahoma es el sello de los profetas: Moisés y Jesús, con él se acaban “las revelaciones", él va a poner orden en una sociedad que no quiso escuchar a Moisés y a Jesús. A cambio solo pide cumplir los 5 pilares del Islam nada difíciles : La declaración de fe, la oración, la limosna, el ayuno y la peregrinación.
Para la invasión de la península ibérica los musulmanes calcularon las posibilidades y las riquezas que podrían obtener para lo que mandaron una expedición a la península y quedaron maravillados. Por lo que noticiados los árabes se pusieron a la preparación de invadir la península.
Los textos musulmanes que hablan de la conquista de la península en su conjunto son fuentes escritas más de un siglo y medio después de los hechos.
Los textos cristianos son irrelevantes, salvo la Crónica mozárabe de 754, escrita unos 30 años después de terminada la conquista.
Los musulmanes había invadido y conquistado anteriormente el actual Magreb, la península arábiga, Siria, Egipto, Libia, la Mesopotamia y Persia
La conquista del reino visigodo en nuestra península requirió de campaña y muchos esfuerzos militares y también de pactos con judíos y nobles visigodos, a cambio de un tributo la mayor de la veces.
Es evidente que el reino visigodo atravesaba una época de debilidad causada por el empobrecimiento del pueblo y as luchas fratricidas  que debilitaban el poder real. Les vinieron de perlas a los musulmanes las calzadas romanas que les facilitaron los desplazamientos del ejército.
Para finales del siglo VII el reino visigodo había perdido alrededor de un 25% de la población. Años de peste, sequía, hambre y otras causas indirectas, durante los reinados de Witiza y de Rodrigo.
Las luchas nobiliarias fueron un fator habitual entre los visigodos, que muchos reyes murieron asesinados.
La división en dos facciones de nobles en esos años fue determinante y es posible que haya sido parte de los witizanos los que favorecieron a los musulmanes incluso como aliados.
Los judíos no se quedaron ajenos, al contrario, viéndose favorecidos seguramente por un mejor trato que con los visigodos, (no olvidemos que habían sido expulsados un siglo antes), siendo numerosos en la Bética, en la Galia Narbonense y junto al Mediterráneo, además habitaban en ciudades y pueblos como Tarragona, Elche, Córdoba Zaragoza, Sevilla, Málaga e incluso en Toledo, entre otras.
Los judíos eran en su mayoría conversos forzados,  pero falsos cristianos por lo que eran castigados salvo algún noble que los defendían como Isidoro de Sevilla. Los cristianos del norte de África que habían huido, informaron del apoyo dado a los musulmanes por parte aquellos judíos.
También sucedía que en el norte de África había bereberes que profesaban el judaísmo por mestizaje, los cuales dieron apoyo a los musulmanes en su conquista.

El reino visigodo cubría el territorio peninsular y la Septimania en el sur de Francia. Baleares estaba bajo soberanía bizantina. Más adelante pasaría a depender  pasar después a depender del reino franco (798) para ser defendidos de los musulmanes.
Lo cierto y verdad es que en el Califato Omeya venían teniendo planes de conquista para la península desde hacía unos cuantos años, dada la información que manejaban de un reino con problemas, empobrecido y con luchas fratricidas.
Al conquistar Marruecos al final de 670, sabemos de una primera incursión musulmana en las costas del levante. Fueron ocupando de a poco el norte de África que se culminó en el 705 al conquistar Tánger. Cartago ya había sido arrasada en el 696. Luego conquistaron Ceuta en el 710.
En el año 711 el rey visigodo, don Rodrigo, estaba luchando en el norte y muchos nobles visigodos no le eran fieles. La situación para los musulmanes se mostraba propicia. Con lo cual se lo tomaron con interés y prepararon la invasión estableciendo acuerdos y consiguiendo apoyos, sobre todo de los judíos, que veían la posibilidad de un mejor trato y conveniencia de negocio que con los cristianos, y sectores sociales visigodos descontentos por los privilegios de las clases altas.
Es posible que hayan sido los barcos de don Julián los que ayudaron a cruzar el estrecho a las fuerzas invasoras. Entraron por Gibraltar, con un ejército de 12.000 hombres, la mayoría bereberes, y desembarcaron a las órdenes de Tariq-ibn Ziyad que era el gobernador de Tánger. De forma y manera que cuando el rey Rodrigo llegó con su ejército en plan a ver qué diablos está pasando aquí, era tarde y en la batalla famosa batalla cerca del río Guadalete, del cual toma su nombre dicha batalla, allí perdió Rodrigo la batalla y la vida.
Ante los enfrentamientos internos de los propios visigodos, la falta de auténtica resistencia y los apoyos, el avance musulmán fue bastante sencillo.
CALIFATO DE CÓDOBA SIGLO X
Los largos gobiernos de Abd al-Ramán III y de su hijo Al-Hakan II (961-976)supone el apogeo del Califato cordobés. La llegada del Almanzor a base de éxitos militares y crueldad sanguinaria, hizo que se hiciera con el poder prácticamente, pero al morir éste en el 1002, poco tiempo duró el Califato, desmoronándose en el 1031 en pequeños reinos de Taifas, que terminaron siendo vasallos de los reinos cristianos. Para mediados del siglo XIII ya solamente quedaba el reino nazarí de Granada, vasallo también de la Corona de Castilla-León. Al dejar de pagar los impuestos, poco después comenzó la guerra que duró diez años y como todos sabemos terminó en el 1492, despareciendo así los reinos musulmanes en la Península.
Por lo que no es cierto que el Islam dominaran aquí durante 800 años.

miércoles, 5 de junio de 2024

Virreinato del Río de la Plata.

Con la llegada de la dinastía Borbónica comenzó una nueva organización administrativa que se manifestó en la creación e Secretarias que reemplazaron a los Consejos. Declinó el poder del Real Consejo de Indias en manos de la Secretaría del Despacho Universal de Indias. Se crearon nuevos virreinatos y Capitanías Generales. Se crearon las intendencias, cuyas cabezas tenían atribuciones administrativas, de Justicia y Hacienda.
Creado en 1776 con capital en Buenos Aires e integrado por las gobernaciones del Río de la Plata, Córdoba del Tucumán, Paraguay y el Alto Perú. Este último fue incorporado con la intención de cubrir los gastos de su administración y funcionamiento con los ingresos fiscales provenientes de la producción de plata potosina.


La fundación de esta nueva unidad político-administrativa respondió en primer lugar, a la rivalidad comercial entre Buenos Aires y Lima que generó un clima de enfrentamiento y separación que amenazó los intereses económicos de la corona. En el ámbito externo influyeron tanto la presencia de contingentes portugueses en la estratégica colonia de Sacramento frente a Buenos Aires, como las incursiones de ingleses y franceses en la Patagonia e islas Malvinas del extremo sur.
El 1º de agosto de 1776 Carlos III, rey de España, creó el Virreinato del Río de la Plata con capital en Buenos Aires en el marco de una serie de medidas destinadas a reorganizar el poder imperial. El antiguo gobernador de Buenos Aires, Pedro de Cevallos, fue nombrado virrey. Comprendía los territorios que hoy ocupan la República Oriental del Uruguay, la República del Paraguay, la República de Bolivia, la República Argentina y el Estado de Río Grande, que pertenece actualmente a la República de Brasil. La creación de este virreinato implicó un aumento de la población de Buenos Aires, la consolidación de la estructura urbana y una transformación de esta ciudad en un importante centro comercial entre las colonias y la metrópolis.
Las provincias españolas en esta parte del continente lindaron desde el primer día con las colonias que Portugal fomentaba en el Brasil.
Los portugueses invadían las tierras de las provincias argentinas, en la región de los ríos, en el interior del Paraguay y de la Audiencia de Charcas. Llegaron en uno de sus avances hasta edificar una fortaleza en la Colonia del Sacramento, en la Banda Oriental, frente a Buenos Aires, desde donde mantenían un activo comercio clandestino con los habitantes de las provincias argentinas. Desalojados, volvieron siempre, sin que los gobernadores de Buenos Aires, dependientes del virreinato de Lima, pudieran obrar con la rapidez y los recursos necesarios.
La corona de España resolvió, en 1776, encomendar una expedición militar para contener a los portugueses y expulsarlos de los territorios que, fuera de toda discusión, pertenecían a las provincias del Río de la Plata. Para darle mayor autoridad, el rey erigió el virreinato, con carácter de provisional, formándolo con las provincias del Río de la Plata, Paraguay, Tucumán, Mendoza, San Juan del Pico y el distrito de la Audiencia de Charcas.

El virrey Ceballos, con un ejército aguerrido que trajo de España, arrojó a los portugueses de los puntos invadidos, destruyó el fuerte que habían construido en la Colonia del Sacramento, y desde Santa Catalina presentó al rey la conveniencia de erigir definitivamente el virreinato. El rey accedió y en octubre de 1777, erigió definitivamente el virreinato del Río de la Plata, nombrando sucesor de Ceballos a don Juan José Vértiz.
El propósito fundamental de la corona de España era el de defender y amparar su territorio, en la desembocadura de los ríos, al Este, en el interior y al Norte, impidiendo que los portugueses continuaran sus avances.
Al virrey Ceballos le debieron las provincias del Virreinato muchos progresos en el orden administrativo, porque fue él quien propuso la creación de una Audiencia en Buenos Aires, y amplió el permiso de tránsito para las mercaderías en las provincias interiores, favoreciéndose al comercio general.
Complementando el propósito de descentralización que demostraba Ceballos, la corona de España dictó en 1782, la real orden de erección de Intendencias, por la que se dividía el territorio del Virreinato, en ocho intendencias. Buenos Aires, Paraguay, Tucumán, Mendoza, Santa Cruz De La Sierra, (Capital en Cochabamba) La Paz, La Plata y Potosí.
Así abarcaba el Virreinato una extensión mayor a la cuarta parte de todo el continente, con las regiones más ricas y el sistema fluvial más poderoso.
La guerra con Portugal terminó por el tratado preliminar de límites, firmado en 1777. El virrey Ceballos, cuando acusó recibo de la cédula real que transcribía el tratado, habló de las dificultades con que se tropezaría en la demarcación, y dio su opinión en una forma que precisaba el estado de estos pueblos. Por esa ignorancia en que permanecieron todos los gobiernos y que aprovecharon los portugueses en sus invasiones, el Virreinato del Río de la Plata perdió gran parte de su primitivo territorio. La población no estaba tampoco en armonía con la enorme extensión del país, pues en esos años, (1778) la Intendencia de Buenos Aires tenía solamente, según el censo que se levantó, 37.679 habitantes, y no era de las menos pobladas.


Se dio comienzo a la demarcación. Durante la administración del criollo virrey Vértiz, se sublevó, en el Alto Perú, Túpac Amaru y arrastró a casi todos los indios peruanos. Vencido, sufrió un horrible castigo: los jueces le condenaron a presenciar el suplicio de todos los miembros de su familia, y después de cortarle la lengua, fue atado a cuatro potros y descuartizado.
El virrey Vértiz fue el primer funcionario de la colonia que tuvo iniciativas en el sentido del progreso moral y material de las provincias argentinas.
Extendió las fronteras y combatió contra los indígenas que habían empezado a invadir las estancias en la provincia de Buenos Aires para robar ganados.
Esas invasiones se llamaban “malones” y coincidieron con el comercio de los productos de la ganadería que se hacía por el puerto de Buenos Aires, y con los contratos con los gobiernos de Chile, para comprar ganados a los indios.
Desde 1777 a 1810, el virreinato tuvo once Virreyes.

domingo, 2 de junio de 2024

PRIMERA DIVISA DE USO MUNDIAL

El real de a 8 Español. El nombre "real" proviene del antiguo término español que significa "real" o "de la realeza". El "ocho" en el nombre se refiere al valor de la moneda en relación con otros valores monetarios. Un real de a ocho se dividía en ocho reales de a uno, que a su vez se dividían en cuatro maravedís. La moneda fue utilizada en todo el mundo, y era ampliamente aceptada en Europa, Asia, América y África.
El peso de ocho, peso fuerte, peso duro o dolar español fue una moneda de plata con valor de ocho reales acuñada por la Monarquía católica después de la reforma monetaria de 1497  que estableció el Real español. 

Gracias el amplio uso que tuvo a finales del siglo XVIII en Europa toda América y el extremo oriente, se convirtió en la primera divisade uso mundial.  
Se convirtió en moneda de reserva global y se estima que en el siglo XVIII, el 50% de todo el dinero en circulación en el mundo era Real de a Ocho. 
En la década de 1530, se comenzó a producir también en oro. A partir de 1535 se empezaron a instalar en América casas de moneda: México y Santo Domingo, y posteriormente Lima y Potosí, Santa Fe de Bogotá. 

PESO HISPANO 
La plata americana llegaba a España donde se acuñaba, en forma sobre todo, de reales de a ocho, moneda también conocida como peso y luego como duro.
Los tipos de las monedas fueron variados, destacando el escudo de la monarquía, el de Castilla y León y la composición simbólica integrada por las columnas de Hércules y el lema del emperador Carlos: PLVS VLTRA.
Así nació el famoso columnario, con la imagen de los dos hemisferios, todo sobre unas ondas que representan el mar, y un nuevo lema circular: VTRAQUE VNUM. En las colonias norteamericanas se les llamaba dólares. Los Estados Unidos independientes tomaron como modelo a los reales de a ocho mejicanos para la emisión de sus propios dólares, iniciada oficialmente en 1792.
Fue la primera moneda de curso legal en los EE UU hasta que una ley de 1857 desautorizó su uso. Muchas de las monedas actuales, tales como el, dolar canadiense, el americano o el yuan chino, así como monedas de Hispanoamérica y Filipinas están basadas en el real de a 8.
Actualmente el término “Peso” se usa todavía en ocasiones para referirse al histórico real de a 8. Esto se debe a que los pesos tenían un peso y diámetro similar al real de a 8.


No obstante, el término “peso” no aparece en el sistema monetario español hasta 1864, y es más exacto referirse al real de a 8 en el anterior sistema monetario.
El Real de a 8 fue una moneda tan codiciada que su hegemonía en el comercio mundial se extendió durante más de 300 años. Precedió a la libra esterlina de oro británica. También al dólar de Estados Unidos. 
De hecho, los estadounidenses se basaron en su modelo para desarrollar su propio dólar.
Era fabricada en gran parte con plata americana y fue la primera moneda en internacionalizarse en la historia moderna. La acuñó el Imperio Español a mediados del siglo XVI, impulsada por las abundantes riquezas que le trajo la colonización de América.


Incluso, cuando el imperio ya estaba en decadencia, siguió siendo unas de las divisas más competitivas en el mundo extendiendo su predominio hasta finales del siglo XIX.
 

lunes, 20 de mayo de 2024

EXPEDICIÓN LOAYSA - ELCANO 1525

Continuamos con la narración de las proezas del Imperio Español que en realidad es poco conocido por muchos. No hay nada mejor que sentirse capaz de hacer grandes cosas, de tener fe y capacidad para enfrentarse a lo desconocido.
Nada detenía a aquellos hombres. Todavía nos preguntamos de que pasta estarían hechos para decidirse por inciertas exploraciones.

JUAN SEBASTIÁN EL CANO 
Entusiasmado por el viaje de Magallanes-El Cano, y mientras se negociaba con los portugueses, Carlos V ordenó la preparación de otra armada, para realizar una expedición a las preciadas Islas Molucas. Puso bajo el mando de García Jofré de Loaysa , a quien concedió el título de capitán general y gobernador y justicia mayor de las islas del Molucas. La flota partió de La Coruña el 24 de julio de 1525 y llevaba como segundo a Juan Sebastián Elcano.
Los portugueses habían descubierto las islas en 1512 al mando de Francisco Serrão. España aspiraba a su control desde Occidente, y los portugueses desde Oriente.
Como sabemos el objetivo del famoso viaje de Magallanes era llegar a las Molucas. En 1519 Fernando de Magallanes empieza la aventura de llegar a las Molucas navegando por occidente, situadas más allá del límite del Tratado de Tordesillas de 1494, tratando de demostrar que estas islas pertenecían a Castilla y no a Portugal. En 1521 cruzó el paso interoceánico que lleva su nombre, en el extremo sur de América y tomó camino hacia el noroeste. La expedición española fue tocando tierra en varias de las islas de las hoy conocidas como Filipinas, enfrentándose en muchas de ellas con los indígenas. En uno de esos enfrentamientos murió Magallanes y su segundo, Juan Sebastián Elcano consiguió completar el viaje, llegando a las Molucas a finales de 1521. Volvió a España desde las islas, en 1522, luego de dar la vuelta al mundo navegando siempre hacia el oeste. La primera vuelta al globo terráqueo.
Las islas Molucas eran famosas por ser las islas de las Especias. Actualmente son un archipiélago de Indonesia.
Como dijimos, el emperador Carlos V, entusiasmado con la proeza de Magallanes-El Cano ordenó la expedición. La flota estaba compuesta por siete naves: la Santa María de la Victoria, la Sacti Spiritus, la Anunciada, la San Gabriel, la Santa María del Parral, la San Lesmes y el patache Santiago y 450 hombres entre ellos aparte de García Jofre de Loaysa estaban Juan Sebastián Elcano, un joven llamado Andrés de Urdaneta y el famoso Rodrigo de Triana.
Siguiendo la ruta de Magallanes, pusieron proa al estrecho que lleva su nombre, donde empezaron los problemas. La nao de Elcano, la Sancti Spiritus, encalló y se fue a pique. Otras dos naves, desalentadas por las dificultades del viaje, desertaron. Una de ellas, la Anunciada, intentó llegar al Pacífico por el cabo de Buena Esperanza. Las aguas la engulleron y no se supo más de ella. La San Gabriel logró regresar a España después de numerosos tormentos. Con solo cuatro naves muy maltratadas, la expedición logró atravesar el estrecho y llegar al Pacífico el 26 de mayo de 1526 después de 48 días de infierno. Allí, sin dar tregua a la marinería, una violenta tempestad separó a la castigada flota que nunca más volvió a reencontrarse.

García Jofré de Loaysa
En la nave capitana, la nao Santa María de la Victoria dirigida por Loaísa, se apiñaron los supervivientes de la Sancti Spiritus con Elcano a la cabeza. El escorbuto no tardó en aparecer. Tiempo después Urdaneta recordó con horror: "Toda esta gente que falleció, murió de crecerse las encías en tanta cantidad que no podían comer ninguna cosa, vi sacar a un hombre tanto grosor de carne de las encías como un dedo, y al otro tenerlas crecidas como si no le hubieran hecho nada".
No menos de cuarenta hombres fallecieron en medio del océano, incluidos el capitán general Loaísa, fallecido el 31 de julio de 1526, tomando el relevo Elcano en el mando, que tan solo duraría 4 días Tres de las naves no llegaron a cruzar el estrecho de Magallanes y sólo una, la Santa María de la Victoria, alcanzó las Molucas, donde la tripulación tuvo que enfrentarse con los portugueses durante casi un año. Tras sufrir innumerables vicisitudes a lo largo de un durísimo y amargo viaje, sólo 24 hombres de esta nao regresaron a España.
En su travesía, llegaron al Pacífico el 26 de mayo de 1526. La expedición estaba siendo desastrosa por el hundimiento de una de las naves, la Santa María del Parral, la pérdida de la Sancti Spiritus y las deserciones de la Anunciada y la San Gabriel. Además, las naves comenzaron a averiarse por los embates del mar y los tripulantes fallecían como consecuencia del escorbuto. Durante el viaje se perdieron el patache Santiago, que llegó a la Nueva España y la San Lesmes de la que no se supo, pero que se cree que arribó en Tahití, aunque también hay quien cree que encalló en la isla de Amanu; desde allí la tripulación habría costeado la isla siendo después apresados, probablemente, por la segunda expedición del portugués Gomes de Sequeira.
La única nave superviviente de la expedición, la Santa María de la Victoria, continuó el viaje y llegó a las islas Marianas donde descubrieron el 21 de agosto la isla de San Bartolomé, pero no pudieron tocar tierra y continuaron hasta llegar el 5 de septiembre la isla de Guam. Se dirigieron a Mindanao en las Filipinas y de allí a las islas Molucas donde llegarían el 2 de octubre de 1526. Quince meses después de partir, solo una de las siete naves y apenas 105 hombres de los 450, llegaron a su destino.
En Tidore, los españoles obedecieron las órdenes del emperador y, ayudados por los nativos, construyeron tres baluartes de piedra, tierra y madera. Los lusos enviaron numerosos requerimientos buscando que los españoles se acercasen a su fortaleza de Ternate a negociar, lo que a todas luces era una trampa.
La paciencia portuguesa alcanzó su límite y, en la noche del 17 de enero de 1527, una flotilla lusa intentó tomar, de forma sigilosa, el control de la Santa María. Un disparo rasgó la noche, habían sido descubiertos. Se produjo entonces un feroz e intermitente cañoneo que duró tres días. La guerra había llegado a las antípodas. Esperando a las otras seis naves que los acompañaron, los supervivientes de la expedición resistieron en sus posiciones durante tres largos años. Entre las junglas y manglares de las Molucas, se sucedieron los abordajes, emboscadas y cruentas escaramuzas entre peninsulares apoyados por sus respectivos aliados indígenas. Los españoles apretaron los dientes, esperando la llegada de unos compañeros que nunca aparecieron, mientras que los portugueses recibieron más refuerzos. Los combates fueron cruentísimos y con diverso resultado. Los lusos lo intentaron todo: comprar a los nativos, envenenar pozos de agua e invitar a los españoles a la deserción. Dos pequeñas naves con escasos recursos llegaron desde México en marzo de 1528: Álvaro de Saavedra a las órdenes de Hernán Cortés, intentó auxiliar a los supervivientes en Tidore. Su maltrecho estado tampoco fue de mucha ayuda ya que requirió algo de pólvora. Enviado de vuelta a Nueva España en busca de más refuerzos, no logró encontrar el difícil camino de vuelta y fue capturado por los portugueses.


ANDRES DE URDANETA
En diciembre de 1529 poco más de 50 españoles se mantenían en pie. Faltos de munición y armamento, abandonados, vestidos con harapos y sin apenas comida se entregaron tras la caída del reino de Tidore, su principal aliado, tres años después de iniciar las hostilidades. Comenzaba para ellos un largo cautiverio en oscuras prisiones portuguesas.
Lo que se desconocía en las Molucas era que ambas coronas ya se habían puesto de acuerdo en el Tratado de Zaragoza, firmado en abril de 1529. Carlos I renunció a las Molucas a cambio de dinero. La noticia no llegó al archipiélago hasta 1532.
Los escasos supervivientes fueron entonces repatriados vía Lisboa, ciudad a la que llegaron en 1536 con lo puesto, después de requisarse todas sus pertenencias. Entre ellos figuraba un desconocido Andrés de Urdaneta. Había partido de La Coruña con 17 años en 1525 y regresó once años después con una hija mestiza. Más adelante sería conocido como uno de los mejores cosmógrafos de su época, pero en 1536 pudo regresar junto a ocho hombres más, derrotado y sin gloria tras completar la segunda vuelta al mundo.
Pero volvería en 1565.

HISTORIA DEL CHOCOLATE

Tras la Conquista de México en la década de 1520   llega a las costas españolas. Fue en el actual Monasterio de Piedra, en el año 1534, dónd...