miércoles, 10 de septiembre de 2025

CASTILLO DE LOARRE-HUESCA

La Real Academia de Bellas Artes lo califica como "ejemplar único en su género". y la Academia de la Historia de "maravillosa construcción en que el románico agotó todos sus primores y atrevimientos".


De base excavada en la roca en tiempos romanos, posteriormente “zuda" árabe, conquistada por Sancho Ramírez en 1070 se construyó un palacio con detalles militares como torres, murallas, puentees, y adarves. También señoriales salones, ventanales religiosos, capillas ábside y sepulcros.
Los cimientos de cuando Navarra no era Navarra sino reino de Pamplona. Se llamó reino de Pamplona, hasta que Sancho VI lo cambiase a reino de Navarra en 1162.


Hay quien asegura que no fue conquistado por Sancho Ramírez. Entre 1033 y 1035 ya pertenecía a Sancho III el Mayor de Pamplona, quien lo construyó como avanzadilla para conquistar Bolea y lo dejó en herencia a su hijo Gonzalo. Al morir Gonzalo pasó a su hermano Ramiro I, primer rey de Aragón, quien construyó la torre del homenaje y lo dejó en herencia a su hijo Sancho Ramírez. Este construyó la mayor parte de lo que hoy se conserva. Ni fue retomado por musulmanes ni reconquistado por Sancho Ramírez.
El primer documento que se le conoce data del 1033.

Presenta un buen estado de conservación, lo que hace que sea uno de los mejores ejemplos de arquitectura militar y civil del románico de España.
Al estar asentado sobre piedra, (precisamente Loarre  quiere decir castillo roquero), suponía una gran ventaja defensiva, ya que así los muros no podían ser minados. Técnica habitual en el asedio de fortalezas, que consistía en construir un túnel por debajo del muro para después hundirlo y abrir así una brecha por la que asaltar. Además está rodeado por una muralla con ocho torreones circulares incluso flanquean la puerta exterior. La muralla asciende por una de las vertientes del inmenso roquedal. En total presente ocho cubos y una sola abertura, la llamada torre-puerta de los reyes.

Tiene una segunda torre vigía.
Pero durante el siglo XV, la población que vivía a los pies del castillo se traslada a la actual villa de Loarre, reutilizando materiales de la fortaleza. aquí es cuando desaparecen gran cantidad de elementos de ornamentación. El retablo barroco del templo también desapareció sin que se pueda determinar cuándo fue.
Hay que destacar los pasos de ronda que circundaban la torre del Homenaje, donde se encuentran estatuas del Salvador sedente y de la Virgen María, y un cortejo de ángeles, verdaderamente representativos de la mejor escultura medieval hispana.

El castillo de Loarre fue utilizado como residencia real durante muchos años, y fue construido con muchas comodidades para sus habitantes reales, incluida una gran ventana desde la que se puede ver el hermoso paisaje, e incluso una habitación con un baño antiguo. El castillo también contiene una mazmorra, una cripta y un laberinto de pasillos, pasillos y túneles.
En 1070, se construyó la hermosa iglesia románica de San Pedro. En 1073, el rey Sancho proporcionó los medios para que el castillo de Loarre se convirtiera en un monasterio para los cánones agustinos, ya que el castillo está cerca de una popular ruta de peregrinación.

El castillo de Loarre ha visto muchas otras adiciones en su historia, como la muralla y las torres más externas que se agregaron en el siglo XIII. Los terrenos del castillo de Loarre salpicados de extrañas formaciones rocosas, que se suma a la mística de esta hermosa fortaleza antigua. Para información del visitante,
El castillo fue usado para el rodaje de la película "El reino de los cielos" (2005) del Ridley Scott con Liam Nelson y Jeremy Iron. El pueblo de Loarre participó en el rodaje de la película haciendo de extra. El castillo puede verse en varias ocasiones durante la película.

Declarado Monumento Nacional en 1906. En la actualidad cuenta con el estatus de bien de interés cultural. Las instituciones regionales y comarcales están interesadas en promover su declaración como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
 

martes, 9 de septiembre de 2025

VIDA DE ISABEL I DE CASTILLA Y LEÓN – (y 3)

Al proclamarse Isabel reina de Castilla el 13 de diciembre de 1474, la guerra por la sucesión al trono de Castilla fue inevitable, estalló y duró cinco años, de 1474 a 1479.
La guerra se la denomina de Sucesión Castellana, y fue entre los partidarios de Isabel y los de su sobrina Juana, (la Beltraneja). Realmente era una guerra de el reino de Castilla y el reino dePortugal. Debemos de tener en cuenta que Juana se había casado con el rey de Portugal Alfonso V, teniendo la niña 13 años. Realmente no tenia conciencia de los hechos.
Francia apoyaba a Portugal porque la unión de Aragón y Castilla le debilitaba en su guerra particular con Aragón. En marzo de 1476 Fernando tomó parte personalmente en la decisiva victoria de Toro.

Francia se retiró del conflicto. Finalmente la guerra terminó con un Tratado de paz en Alcácovas, reconociendo Portugal a Isabel y Fernando como reyes de Castilla y a quedando en manos portuguesas la hegemonía del Atlántico, salvo las Islas Canarias. Juana permaneció para siempre en Portugal.
De haber perdido la guerra Isabel y Fernando, perderían la corona de Castilla y pasaría a su sobrina Juana, que en realidad era que pasaba a los dominios del rey portugués. La historia de España hubiera cambiado totalmente.
El rey de Aragón Juan II moría en enero de 1479, quedando su hijo Fernando con todos sus títulos. Ya era rey de Sicilia y heredó además de Aragón, Cerdeña y Conde de Barcelona. El reino de Navarra lo heredó su hermana Leonor.
Antes de esto, en junio de 1478 Isabel I daba a luz un niño, Juan de Aragón, que desplazó de la herencia a su hermana Isabel por ser varón, siendo Príncipe de Asturias y por lo tanto heredero de la corona de Castilla y lo sería de Aragón. Era el segundo hijo de los reyes. Pero murió joven en 1497 con diecinueve años. Al morir Juan convierte a su hermana Isabel de Aragón, otra vez en la heredera del trono de Castilla, que a la sazón era reina consorte de Portugal ya que siendo viuda se había vuelto a casar con el que luego llegó a ser Manuel I de Portugal. Este matrimonio tuvo un hijo que se llamó Miguel de la Paz, nacido en 1498 y que al ser varón fue heredero de las coronas de Castilla, Aragón y Portugal. En el parto murió su madre Isabel. El niño estuvo al cuidado de sus abuelos Fernando e Isabel, pero murió en el año 1500. Este fallecimiento es el que provoca que sea su hermana Juana (la loca), la heredera de la Corona de Castilla.

Juana I de Castilla y León 
Los reyes de Castilla y Aragón no fueron unos reyes que disfrutaran de la corte, de fiestas y placeres.
En aquella época existían en la península los reinos de Aragón, Castilla, Portugal, Navarra y el reino nazarí de Granada. Fuera de Granada los musulmanes vivían entre cristianos. Los acuerdos pactados con las poblaciones de Al-Andalus vencidas variaron pero en general se garantizó la permanencia de los musulmanes y se les permitió conservar su religión, costumbres, organización y derecho, aunque continuaron las obligaciones tributarias. Esta actitud de los monarcas cristianos se producía, principalmente, por la necesidad de no despoblar y mantener la vida económica de los territorios ocupados. Pero esos moriscos eran rechazados por los cristianos, no los consideraban auténticos del país y recelaban de ellos... Por otra parte, la presencia judía, que se remonta a la época romana, y su antipatía hacia ellos, eran para los cristianos igual de antigua. Su dedicación a la banca y al préstamo y el estricto mantenimiento de sus costumbres eran otras razones que iban alimentando el rechazo de la población.
La desconfianza de las conversiones llevó a los reyes a solicitar del papa Sixto IV, en 1478, la autorización para poner en marcha una nueva Inquisición que persiguiera la herejía, es decir la práctica de los ritos judíos por parte de los falsos conversos. Se restableció y asentó la Inquisición.
En tiempos de los reyes cristianos se identificaba la política con la religión. Fue la búsqueda de la unidad religiosa lo que impulsó a los reyes a decretar la expulsión de los judíos que no se quisieran convertir, en marzo de 1492. 
Ya desde 1266, en Granada, los reyes de Castilla, cobraban un tributo a sus vasallos musulmanes. Granada, se beneficiaba de sus privilegiadas relaciones de sangre con el norte de África, era la puerta del oro africano.  El oro comenzó a escasear, y el gobernador de Ronda se apoderó de Zahara en 1481. Fernando acuarteló Córdoba y organizó un ejército con su Estado Mayor. Ronda y Marbella cayeron en 1485, Loja en 1486 y Málaga en 1487, tras un sonado asedio. Málaga era muy importante y justificaba el dispendio. Los reyes reclamaron soldados de todos sus reinos, y hasta allí llegaron enfervorecidas huestes de vizcaínos, guipuzcoanos, asturianos y valencianos. Desde 1487, tomada Málaga, la guerra entraba en fase de liquidación y Fernando pasaba a ser el más brillante de los reyes europeos. Granada resistía, Isabel envió un emisario negociador y se fijó el 2 de enero para la entrega de la ciudad. Se terminó así la Reconquista.  La noticia recorrió Europa y los reyes incluido el de Francia, lo celebraron y ordenaron misas en gratitud por la victoria.

Isabel recibe las llaves de Granada 
Cristóbal Colón había conseguido su primera entrevista con los reyes en enero de 1486. Cuando cayó Granada en 1492, se produjo una nueva audiencia de Colón, en la que los monarcas aceptaban la posibilidad de la empresa que ofrecía Colón, partir por occidente a la India por mar. Los monarcas fueron convencidos. Así firman el acuerdo,  las “Capitulaciones de Santa Fe”  fue emitido por la Real Cancillería de la corte de los Reyes Católicos y firmado el 17 de abril de 1492 en la localidad de Santa Fe de la Vega, Granada.
Como sabemos Colón y la expedición llegaron a tierra firme el 12 de octubre de ese año. A su vuelta a la península fue recibido Colón y su puñado de indios en el salón de Ciento de Barcelona. No se equivocó Fernando en un punto: los poderes otorgados eran excesivos y por ello Colón causó daños aunque no lo pretendiera.
Los propios Reyes Católicos nunca fueron conscientes de la envergadura del Descubrimiento. Su participación en el proyecto fue muy limitada, las exploraciones y conquistas se realizarían ya con Carlos I.
Los RR CC tenían ente sí un problema de sucesión. La herencia pasaba a Juana ya su esposo Felipe, el hermoso. Las relaciones entre ambos cónyuges eran tormentosas, la reina Isabel tenía la seguridad de que su hija se volvería loca y Felipe era amigo de Francia y no le gustaba la corte castellana por recia poco divertida. Algunos nobles que habían combatido a los Reyes Católicos en 1475, se prestaron a servir de apoyo a Felipe que quería sustituir a Fernando en el momento en que Isabel falleciera.
La reina Isabel la Católica falleció en 1504 en Medina del Campo. Previamente informada por sus embajadores de la situación, añadió a su testamento un codicilo en el cual disponía que si Juana estaba ausente, renunciaba por sí misma o era incapacitada, Fernando y no Felipe debía tomar las riendas del poder. Después del fallecimiento Fernando hizo proclamar a Juana reina y asumió, en ausencia de ésta, las funciones reales. Felipe el Hermoso viajó a España en compañía de su esposa, con tropas, y reunió en torno a su persona un partido nobiliario. Ante la perspectiva de una nueva división con guerra, Fernando cedió a su yerno el ejercicio (concordia de Salamanca, 1505) a cambio de una indemnización, y se retiró a Aragón y luego a Italia.

Felipe I de Castilla y León 
Pocos meses después muere Felipe el hermoso y Fernando regresa  y nombra al Cardenal Cisneros como regente de la gobernación de Castilla, aunque Juana I era la reina, y lo fue hasta su muerte, compartida desde que llegó su hijo Carlos en 1517.
 
 

lunes, 8 de septiembre de 2025

VIDA DE ISABEL I DE CASTILLA – (2)

Como narramos en el capítulo anterior, Isabel y Fernando ya eran matrimonio, pero la boda no tenía el consentimiento expreso del rey Enrique IV, si bien Isabel le había escrito para noticiarlo, pero no había respondido algo al respecto. Cuando, pasado un tiempo llegó la respuesta del rey, que dilataba la decisión alegando que el maestre de la orden de Santiago se encontraba ausente y no podía consultar. El monarca supeditaba al enemigo de Isabel la resolución.

Castillo de Arévalo - Ávila 
Nobles como los Mendoza, prelados y gente del pueblo, todos querían un reino fuerte y estable, desprovisto de un juego de intereses de cortesanos y aprovechados después de la muerte de Enrique IV. En Asturias invocaron fidelidad a “su princesa”, recordemos que Isabel era Princesa de Asturias y en esas tierras se consideraba mucho la herencia visigoda.
La pareja se refugió en Ávila. Luego nació la primogénita, Isabel, en 1470, cuando la situación de Isabel y Fernando era tan comprometida que tuvieron que refugiarse en la segura, pero lúgubre, fortaleza de Dueñas, Palencia.
El rey Enrique, mal asesorado realizó un acto que se celebró en octubre de en el que se declaró heredera al trono del Reino de Castilla a Juana la Beltraneja anulando los acuerdos de los Toros de Guisando donde se había declarado heredera a Isabel.
Enrique IV de Castilla desheredó a Isabel, declarando nulo los acuerdos de los Toros de Guisando, ya que Isabel se había casado sin su permiso. Enrique IV juró junto con su esposa Juana de Portugal sobre la cruz que la niña era hija legítima suya y de su esposa, y se leyó la dispensa papal, (Enrique y Juana eran primos segundos), dispensando de los juramentos prestados y declaró heredera al trono del Reino de Castilla a su hija Juana.
Los historiadores con los años pudieron confirmar que la dispensa era falsa, pues no consta en los registros vaticanos.

Juana, la Beltraneja

Muchos vieron la jugada. En La Ceremonia de la Val de Lozoya no asistieron allí representantes de los tres estados del reino, como era preceptivo para anular el pacto anterior. Con lo cual no era válida.
Mientras tanto Fernando sin inmutarse iba tomando decisiones importantes, se supone con el visto bueno de Isabel. Tenían interés en desmontar poco a poco las influencias que nobles y prelados tenían sobre la monarquía. Los tiempos cambiaban y se terminaba la Edad Media y va apareciendo el Renacimiento con la Edad Moderna.
El reino se iba desintegrando porque Enrique se estaba quedando solo. Tenía el poder, pero no el favor del pueblo. Para los intereses de Roma la cuestión política no primaba. Era la salud de la Iglesia. Y los nuevos príncipes ofrecían la misma o mayor garantía y además un futuro continuado en este asunto. El 1 de noviembre de 1471 figuran dos bulas confirmando la legitimidad de la boda de Fernando e Isabel por el nuevo papa. La aceptación general del nuevo reino parecía asegurada, cada vez recibían más adhesiones y no solo de la nobleza.
La consolidación de Fernando en un trono acabaría abarcando un total de siete reinos. Esto era un cambio importante en Europa. Francia se dio cuenta de esto y Luis XI mandó invadir nuevamente el Rosellón por lo que Fernando marchó al Rosellón durante un año luchando en la guerra de Aragón contra Francia. La presencia de Fernando con tropas suyas y castellanas le presentaba como uno de los protagonistas del conflicto.
Mientras el noble Pacheco, partidario de Enrique, urdía un plan funesto para los príncipes. Se haría con el tesoro real, con Segovia e influiría en los pueblos en contra de los judíos y conversos de forma que se pusieran a su favor como protector y a la vez en contra de Isabel. Enterada de esto, Isabel movió sus hilos con nobles y señores para hacer ver que ella era la mejor garantía de hacer cumplir las leyes de Castilla, con lo cual protegía a los judíos en esos momentos. Isabel fue entonces una defensora de los judíos.
Fue cuando volvió Fernando. Isabel con una pequeña escolta llegó y entró en Segovia, donde estaba Enrique. Ante el rey se inclinó y besó sus manos en señal de respeto y éste la abrazó. La reconciliación se había realizado, en los momentos más apremiantes. El 1 de enero de 1974 se conocieron Fernando de Aragón y Enrique IV de Castilla en el Alcázar. Isabel y Enrique llegaron a pasear a caballo juntos por Segovia, a la vista del pueblo, dando muestra de la buena relación existente entre ambos. Pero la salud del rey se iba minando.

También en diciembre de ese año, estando en Madrid Enrique se sintió muy mal. En el Alcázar se tumbó vestido así murió. Marcaría el tránsito del futuro de Castilla y de España entera. Era el 12 de diciembre de 1474. Isabel se encontraba en Segovia y Fernando en Cataluña en la guerra del Rosellón. No había testamento, ni el rey había respondido a las cartas de Isabel. El contador real cabalgó hacia Segovia para noticiar a Isabel.
Anulada por el papa los actos de Val de Lozoya y confirmados los de Guisando, a los ojos del pueblo de Segovia la situación era la del rey en buena armonía con su hermana, sin disputas por lo que se confirmaba a Isabel y Fernando como herederos legítimos. A muchos les pareció que Isabel no debía demorar su proclamación como reina de Castilla y recordamos que no se necesitaba ser coronada o consagrada, como en Francia, sencillamente se le proclamada. Así, el 13 de diciembre de 1474, Isabel de Trastámara asiste a los solemnes funerales por el recientemente difunto rey Enrique IV. Isabel vestía la ropa de paños de luto. Pero a la salida se despojó de los paños apareciendo con todo el lujo que requería la siguiente ceremonia, la proclamación como reina de Castilla. Isabel no esperó a su esposo, ya de camino, para proclamarse reina.
Fueron al Alcázar tomando Isabel posesión de su poder real.

Actores de la serie "Isabel"
Parece ser que al llegar Fernando con sus tropas, hubo de esperar a las puertas de la ciudad dos días. Fue el 2 de enero de 1475 cuando Fernando se unió a sus esposa, la Reina que le esperaba en la Catedral. Entraron en el templo asistir en el altar mayor a la ceremonia litúrgica de acción de gracias. Pasaron al Alcázar. Y en el banquete hablaron, pero no hay documentación de esa charla, lo que si quedó claro es que Isabel supo explicar a Fernando su decisión de plocamarse reina sin esperarlo. Y se pensó en un documento que dejara los trabajos entre cónyuges perfectamente claro.
La reina Isabel siempre manifestó y abrigaba el deseo de un poder compartido, como una función, no una propiedad. De este modo dos personas podían simultáneamente ejercerlo. En este sentido se les encargó a personas de ambas tendencias que elaborasen un documento con forma de acta arbitral determinando la forma y circunstancia en que debía llevarse en adelante el ejercicio compartido del poder real. Aquello fue llamado la “Concordia de Segovia”, firmada el 15 de enero de 1475.
El 28 de abril Isabel entregó a su marido un documento delegando en él sus propios poderes, sin renunciar a ninguno. A su vez Fernando el 14 de abril de 1481, cuando entró en posesión de la Corona de Aragón, entregaría a Isabel un documento similar. Así se completaba un proceso iniciado en 1369 con la revolución que derribó al rey Pedro I comenzando la dinastía Trastámara. Se emprendió una tarea impresionante, desde los proyectos de Alfonso X y Alfonso XI. La Monarquía Hispana surgía como primera forma de organización de un Estado, que busca una razón de existir.
A punto de heredar la Corona de Aragón, nuestros protagonistas tuvieron que plantearse el modelo político que les convenía. La norma castellana, que se aplicaría en el caso de Granada, tendiendo al unitarismo institucional, mientras que la aragonesa se inclinaba por la unión de los reinos, conservando cada uno las tres características esenciales, un territorio, un fuero y unas Cortes. Cuando Navarra fue incorporada a la Corona de Castilla, años después, se hará mediante pacto que le permitía conservar esa condición de reino. Una demostración de que se había optado por la fórmula de unión de Reinos.


Como Caballero del Toisón de Oro, Fernando necesitaba un emblema y una leyenda acorde. Isabel había escogido el haz de flechas, que significaba la reunión de los reinos, y la F era la inicial de su marido. Acudió Fernando al humanista Antonio de Nebrija, poniéndole como condición que comenzara por la letra Y. El gran latinista le propuso una pequeña historia de la biografía de Alejandro Magno. Llegado éste a Gordión el macedonio se había encontrado un yugo con la letra Y, en torno a la cual se había atado un nudo con tal malas artes que nadie era capaz de desatar. A esto estaba la promesa de conquistar el mundo. Alejandro sacó su espada y la cortó de un tajo diciendo “Tanto Monta”, lo que en castellano del tiempo viene a decir, “da lo mismo cortar que desatar”. En otras palabras, se aclaraba que Fernando, haciendo valer su posición, tomase la vía recta, y que el fin justifica los medios, asunto hoy discutible, pero entonces no era así. Los dos emblemas, yugo y flechas, aparecen juntos en los escudos de armas y sirven para la identificación del reinado.

domingo, 7 de septiembre de 2025

VIDA DE ISBEL I DE CASTILLA Y LEÓN – (1)

En el pueblo de Madrigal de las Altas Torres, en Ávila, nació Isabel de Trastámara el 22 de abril de 1451. Hija de Juan II de Castilla y de su segunda esposa Isabel de Portugal. Al nacer era infanta de Castilla, ya que el heredero y por lo tanto Príncipe de Asturias era su hermano de padre Enrique, (futuro Enrique IV),  hijo de Juan II del primer matrimonio con su prima María de Aragón. Dos años después de Isabel nació Alfonso en noviembre de 1453, por lo que Isabel pasaría a quedar en tercer lugar en la sucesión a la corona.

MADRIGAL DE LAS ALTAS TORRES
Juan II murió en julio de 1454, por lo que Isabel que tenía tres años. La reina Isabel de Portugal pero ya su marido pensaba en que la reina sufría algún desequilibrio mental, lo que se corroboró, pues a la muerte de su marido ella entró en una profunda depresión.
El primogénito de Juan II, Enrique IV, ya rey de Castilla, envió a sus hermanos, Isabel y Alfonso, con su madre a Arévalo lejos de la corte y cerca de Medina del Campo. Isabel recibió una esmerada educación de acuerdo con lo que se esperaba que aprendiera una princesa del momento.
Habían pasado seis años cuando la reina consorte de Enrique IV anuncia que está embarazada. La reina Juana de Avis ve que la línea de sucesión a la corona está marcada y desplaza a los hermanastros, Alfonso e Isabel.
La hija de Enrique IV, Juana, obtuvo el reconocimiento de todos los nobles y eclesiásticos de sucesora por ser hija del rey y su esposa Juana de Avis, otorgándole el título de Princesa de Asturias, formalidad tradicional en Castilla que aún se conserva para quién es heredero a la corona.
De 1461/62 Alfonso y su hermana Isabel pasaron de estar bajo la vigilancia de la reina Juana de Avis en la Corte, a estar en la protección dela marqués de Villena, Juan Pacheco, personaje intrigante y manipulador como pocos. Pero los hermanos estaban separados, Alfonso con el marqués y protegido por Gonzalo de Córdoba, (el que fuera el Gran Capitán).
El 25 de octubre de 1464 es designado el Príncipe don Alfonso, el hermano de Isabel como heredero del Reino de Castilla por una serie de nobles encabezados por Pacheco. Lo que se llamó La Farsa de Ávila.

Recreación de la Farsa de Ávila 
Realmente era una burla en la que con un muñeco se reconocía al rey Enrique IV y se le destronaba por cobarde, homosexual y cornudo.
Estalla una guerra que terminará en 1468. Alfonso reinó durante tres años. Fue un títere en manos del marqués Pacheco y no fue seguido por muchos castellanos que seguían fieles a Enrique IV. Pacheco ofreció al rey una propuesta de paz. Eliminaría a su rival (Alfonso) de la escena política y a la vez ofrecería a Isabel para casarla con su hermano, Pedro Girón poco tiempo después se sintió enfermo y sorpresivamente murió en abril de 1466. La muerte de Pedro Girón detuvo toda negociación y prosiguió la guerra. En el mes de agosto de 1467 ambos bandos se enfrentaron en Olmedo.

ENRIQUE IV 
Enrique convino el matrimonio de Isabel con Alfonso V de Portugal, pero ella se negó. También rechazó al duque de Guyena hermano del rey de Francia. Juan II de Aragón negoció en secreto con el obispo Carillo la boda de su hijo Fernando con Isabel. Ambos eran Trastámara y de una edad similar.
En el mes de julio de 1468 muere repentinamente Alfonso. La guerra por la corona había terminado. La situación estaba muy complicada para el rey.
La legitimidad de Enrique era indiscutible. Pero no así la de Juana su hija. Se confirmaban las sospechas de Isabel, lo que urdía Pacheco eran los enlaces concertados de Isabel con el rey Alfonso V de Portugal. El hijo de éste, Juan, con la niña Juana (la Beltraneja), reconociendo sus derechos. De este modo reinarían primero Alfonso de Portugal y luego su hijo Juan de Portugal. Para ello Pacheco entregaría al rey todo su poder y sujetaría a Isabel políticamente. Pacheco tenía grandes intereses, tanto en Castilla como en Portugal.
Por entonces Juana de Avis, la madre de la Beltraneja, estaba poco menos que despreciada por el rey, y a partir de la guerra de Sucesión en Olmedo y Segovia había sido apartada de la corte. El rey Enrique viendo la situación tan delicada, manda a su mujer a volver a la corte. En agosto de ese año Juana de Avis estaba en avanzado estado de gestación.
El deshonor de Enrique era evidente y motivo de murmullo y chanzas. Para Enrique IV es un golpe enorme que equivale a no poder demostrar la fidelidad de la reina y por consecuencia la sospecha de la bastardía de su hija Juana. A esto se sumaba que la boda entre Enrique IV y Juana, que eran primos segundos, no tenía el necesario consentimiento papal.

Recreación del acuerdo de Los Toros de Guisando 

La poderosa Liga Nobiliaria señaló el 19 de septiembre de 1468 para la entrevista de ambos hermanos en Guisando. Un día antes, en Cadalso, ambas partes firmaron un documento en que se señalaba las cosas de las que se hablaría. Al día siguiente se realizaron los actos, el Tratado de los Toros de Guisando, pero no se firmó ningún documento, se acordó detener la guerra. Segundo, Isabel sería reconocida como Princesa de Asturias, otorgándose su juramento por las Cortes y la Junta de la Hermandad en el plazo de cuarenta días. Tercero, Isabel recibirá rentas y propiedad como el Principado de Asturias, las rentas de Ávila, etc. Cuarto, Isabel se comprometía a casarse con quien el rey acordase, con el consejo del arzobispo. Pero la princesa se reservaba el derecho a rechazarlo. Este punto resultó fundamental. Quinto se establece que el rey no está legítimamente casado con Juana de Avis “a servicio de Dios”, es decir, que aquel matrimonio entre primos segundos se realizó sin dispensa papal. La “hija de la reina”, (por no certificar quien era su padre), será llevada a la Corte. Al no estar casados sus padres, era hija ilegal.
De momento estaba todo aclarado.
La cuestión del matrimonio de Isabel interesaba a unos y a otros.  Se le propuso al duque de Guyena, un francés hermano de Luis XI, un indeseable y deforme persona que la hubiera llevado a Francia, que por supuesto rechazó. Para Isabel estaba claro que el rey había incumplido los pactos habidos. Fundamentalmente porque había disuelto las Cortes.
Acuerdos de Cervera 1469. En abril de 1469 la cuestión del matrimonio de Isabel interesaba a unos y a otros. Para Isabel una cosa estaba clara, el rey había incumplido los pactos habidos. Fundamentalmente porque había disuelto las Cortes.

Serie "Isabel"
Isabel y Fernando eran hijos de primos hermanos, y era imprescindible una dispensa para legitimar el matrimonio. Pero se entendía que mientras la solicitud presentada no fuera negada por el papa, ésta ilegitimidad no existía. El riesgo es que se resolviera a posteriori. Fernando firmó las capitulaciones a las que Isabel incluyó una solo condición, que Fernando reconociera a Enrique IV como el único y verdadero rey de Castilla. Isabel sería soberana en Castilla y Fernando su consorte, mientras que Fernando sería soberano en Aragón e Isabel asumiría el papel de consorte. No suponía la creación de un Estado unificado, sino la unión dinástica. 
Quedaba la cuestión de la dispensa papal. Solicitada esta Paulo II deseaba la paz entre cristianos y a la vez no podía enemistarse con los reyes y los futuros reyes de Castilla ni con el de Aragón, como tampoco con el de Portugal. Con lo cual, dejó pasar el tiempo.
Los eclesiásticos que rodeaban a Isabel, con Carrillo a la cabeza la convencieron de que podía casarse sin preocupaciones de conciencia. No había orden papal de casarse con el portugués ni tampoco rechazo a casarse con Fernando.

Boda de Isabel y Fernando (serie)

Fernando tenía dieciocho años, pero era todo un hombre, incluso iba a contar con dos hijos bastardos concebidos antes de casarse.
El día 14 de octubre de 1469, llegó la comitiva al caserón de los Vivero, se conocieron Fernando e Isabel. El día19  se desposaron Fernando e Isabel. Se celebró sin gran pompa. Por la tarde se celebró la misa de velaciones y aquella noche, marido y mujer consumaron matrimonio cumpliendo con las rudas condiciones que entonces eran preceptivas. Nadie formuló acusaciones o dudas de la validez del matrimonio.
La boda no tenía el consentimiento expreso del rey Enrique. Lo sabía y tampoco había dicho algo al respecto. Nobles y prelados aconsejaban “desinteresadamente”, ya que el asunto, tarde o temprano se convertirían en reyes de Castilla y Aragón, y había que ir tomando posiciones. Fernando demostró que no se dejaba manejar fácilmente, e Isabel ahora con más razón, al verse apoyada por su marido y coincidiendo en sus planes, escuchaban, callaban y procuraban ganarse a la mayor cantidad de gente que se adhirieran a su causa.

RAMÓN MARÍA DEL VALLE-INCLÁN.

Nació en Villanueva de Arosa, en 1869 - Murió en Santiago de Compostela, 1935. Narrador y dramaturgo. Se le considera, junto con Federico Ga...