lunes, 12 de mayo de 2025

COMPOSITORES DE LA MUSICA NACIONALISTA ESPAÑOLA

MANUEL DE FALLA.
Manuel María de los Dolores Falla y Matheu nació en Cádiz, el 23 de noviembre de 1876 y murió en Argentina, en Alta Gracia, provincia de Córdoba el 14 de noviembre de 1946.
Falla es, junto con los catalanes Felipe Pedrell, Isaac Albéniz y Enrique Granados, Federico Monpou, el madrileño Joaquín Turina y el vasco Jesús Guridi,  uno de los grandes compositores que conforman la gran “Música Nacionalista Española”.

Manuel de Falla 
Conoce a músicos de la talla de Felipe Pedrell o Joaquín Turina, compositor que le anima a trasladarse a París y en donde entrará en contacto con gente como Maurice Ravel, Claude Debussy, Isaac Albéniz o Paul Dukas. Permanece allí hasta el 1914, año en que regresa a España, primero para residir en Madrid y posteriormente en Granada, marchándose finalmente en calidad de exiliado a causa de la Guerra Civil Española a Argentina, país en el que muere en el año 1946.

El amor brujo
La obra El Amor Brujo, en la que se incluye esta Danza Ritual del Fuego, se estrenó en su versión definitiva durante su etapa granadina, y el argumento trata de una historia de hechizos y brujería de una gitana, Candela. Manuel de Falla se inspiró en antiguas leyendas gitanas para componer la obra y utilizó elementos musicales del flamenco que, como sabemos, nace de un mestizaje de las culturas árabe, judía, cristiana y gitana.
El amor brujo triunfó como otras muchas obras de Falla.
A principios del siglo XX, la sevillana Pastora Imperio expresó su deseo de interpretar una obra compuesta por Manuel de Falla y escrita por el reputado dramaturgo Gregorio Martínez Sierra. Durante un tiempo, Falla y Martínez Sierra se dedicaron a escuchar cantar a Pastora y a su madre, La Mejorana, mientras que, al mismo tiempo, recogían las antiguas historias de la tradición gitana, llenas de amor, desamor, desencuentros y traición trasmitidas oralmente de generación en generación. Con el tiempo, el resultado de estas reuniones se convirtió en un ballet de cámara.
El amor brujo fue estrenado en el Teatro Lara de Madrid el 15 de abril de 1915 con Pastora Imperio en el papel protagonista. Algo más tarde, Manuel de Falla y Martínez Sierra revisaron su trabajo, incluyendo en el repertorio al amante fantasma, que como siempre, había sido diabólico, infiel y malo y ampliando la dotación musical hasta alcanzar una gran orquesta. Enérgica, directa y clara, fue estrenada en París el 22 de mayo de 1927 con un rotundo éxito, siendo esta es la forma que hoy conocemos.
El amor brujo es una de sus obras más sobresalientes de Manuel de Falla y del nacionalismo musical español.
El 28 de septiembre de 1939, después de la Guerra Civil Española y ya comenzada la Segunda Guerra Mundial, Manuel de Falla se exilió en Argentina, a pesar de los intentos de los gobiernos del general Francisco Franco, que le ofrecían una pensión si regresaba a España. Fue nombrado Caballero, con el grado de Gran Cruz, de la Orden de Alfonso X el Sabio en 1940. Vivió en su exilio argentino gracias a la ayuda de algunos mecenas, entre ellos la familia Cambó, y lo hizo de forma tranquila en una casa en las sierras, donde su hermana cuidaba de él, ya que casi siempre estaba enfermo. Finalmente, falleció el 14 de noviembre de 1946 . El 22 de diciembre sus restos son embarcados rumbo a España y, acompañados de su hermana María del Carmen, arriban al puerto de Cádiz el 9 de enero de 1947. El cortejo fúnebre se dirigió del muelle a la Catedral de Santa Cruz de Cádiz, donde se celebró un solemne funeral. Con autorización del papa Pío XII, los restos fueron enterrados en la cripta de la Catedral.
 
ISAAC ALBÉNIZ .
Fue uno de los principales embajadores de la música española en el mundo y abrió  la música en la España de su tiempo a la modernidad.
Murió el 18 de mayo de 1909 en la localidad francesa de Cambo-les-Bains Isaac Albéniz, uno de los compositores españoles más importantes de todos los tiempos. Había nacido en Camprodón (Gerona) en 1860 y fue un niño prodigio del piano, dando su primer concierto a los 4 años. Gracias a una beca de Alfonso XII pudo estudiar estudios superiores de música en Bruselas, dando muestras de un don innato para el lirismo y un conocimiento profundo del folklore español y la tradición musical europea. A partir de 1890 vivió primero en Londres y más tarde en París, donde su música se empapó del impresionismo francés, especialmente de Debussy, y abrió el camino para jóvenes españoles como Joaquín Turina y Manuel de Falla. Afectado de una dolencia renal, su salud fue empeorando hasta que murió prematuramente. El gobierno francés póstumamente la Legión de Honor.
 
ENRIQUE GRANADOS
fue un gran pianista, también docente desde los trece años. Su obra, algo menos difundida que la de los anteriores comparte con su época un nacionalismo y posromanticismo.
Nació en Lérida, 1867.  Era hijo de padre cubano y de madre gallega. A los diez años de edad empezó a dar conciertos públicos. En 1887 pasó a París, donde estudió. Regresó a Barcelona en 1889, donde dio un memorable concierto en el Teatro Lírico. En 1892 obtuvo un nuevo triunfo como concertista y como compositor.
En una de las primeras "Festes de la Música Catalana", obtuvo el primer premio; su Allegro de concierto fue laureado en un concurso nacional.
En 1910 envió sus composiciones para piano Goyescas al pianista Montoriol Tarrés, que residía en París. Tarrés estudió la obra y se entusiasmó con ella. La divulgó y pronto, ganado el apoyo de Vuillermoz, logró que la Société Musicale Independante organizara el 4 de abril de 1914 un concierto enteramente dedicado a Enrique Granados. El éxito fue rotundo y constituyó la consagración del joven compositor. A raíz de este concierto le fue concedida la Legión de Honor y recibió de Rouché, director de la ópera parisiense, el encargo de convertir las Goyescas en ópera, para su representación en París. Enrique Granados puso manos a la obra pero estalla la Primera Guerra Mundial y el proyecto se vuelve irrealizable. Schirmer, el editor neoyorquino, enterado de la dificultad, se apresura a hacer proposiciones a Granados. Schirmer está dispuesto a editar la obra y la hará representar en Nueva York; Granados acepta y se traslada a América con su esposa.
La representación de Goyescas, efectuada en el Metropolitan el 28 de enero de 1916, constituyó un éxito, y Granados fue invitado por el presidente de los Estados Unidos para tocar en la Casa Blanca. Esta circunstancia fue causa de que el compositor perdiera el transatlántico que había de volverle a España. Cumplido su compromiso, no quiso esperar la salida de otro buque español y embarcó para Inglaterra; allí, en Folkestone, tomó el "Sussex", el cual, a poco de zarpar, fue torpedeado y hundido por un submarino alemán. Granados y su esposa murieron ahogados. La noticia causó sensación; en Barcelona, en Lérida, en París, en Nueva York, se le tributaron homenajes póstumos.
Enrique Granados fue además notable pedagogo; de la academia de música que en Barcelona llevaba su nombre salieron muchos de los mejores pianistas catalanes de esos últimos tiempos. Nuestro autor fue un extraordinario intérprete de la música popular hispánica, a la que estilizó con su alto sentido poético y su fina intuición.

"Quejas" o "La maja y el ruiseñor" 
es una de las seis piezas que conforman la suite "Goyescas", compuesta por Enrique Granados entre los años 1909 y 1911 en una suerte de homenaje al maestro Francisco de Goya, por cuya obra sentía gran admiración. Considerada su obra maestra, la suite lleva el subtítulo "Los majos enamorados" aludiendo a aquellos jóvenes y fornidos personajes, típicos del Madrid de los siglos XVII y XVIII que se caracterizaban por sus trajes vistosos y modales algo atrevidos, abundantemente retratados por el maestro español en el trazado de su obra.

domingo, 11 de mayo de 2025

JUAN PRIM Y PRATS- VIDA Y ATENTADO MORTAL

Nació en Reus, y de joven ingresó en el ejército donde llegó a coronel. En 1841 fue diputado por Tarragona en el Partido Progresista. Sofocó a sangre y fuego la sublevación de Barcelona en 1843. Luego fue nombrado gobernador de Puerto Rico y alcanzó gran prestigio y fama por su intervención en la guerra de África. Por ello fue nombrado Jefe militar de las fuerzas españolas de la intervención militar en México juntamente con Francia y Gran Bretaña, para apoderarse de fortalezas en la costa atlántica por precaución ante las amenazas del presidente Benito Juárez. Francia anunció que establecería un imperio con el Archiduque Maximiliano de Austria, lo que hizo que España e Inglaterra se retirasen, decisión acertada de Prim, ya que se perdió la enemistad con México y su pueblo.

Podía ser progresista, sin duda, aunque ello no significaba plegarse al dios del momento, como demostró en 1842 al enemistarse con Baldomero Espartero, en principio su aliado, al favorecer este los tejidos ingleses en perjuicio del textil catalán. Se exilió a París, contactó con el círculo de María Cristina de Borbón y al año siguiente se pronunció en Reus contra el regente para inaugurar su prolongada fidelidad a la corona isabelina. Este episodio conllevó, a imitación de lo realizado por el duque de la Victoria el año anterior, la resolución de asediar y bombardear Barcelona desde Montjuic para terminar con la revuelta de la Junta Central, inmortalizada desde el anecdotario por su famosa frase "o caja o faja", caja de pino o faja de general, obtenida por sus méritos y devoción para con el poder.

A lo largo del primer decenio del reinado isabelino, Prim exhibió más de siete vidas entre detenciones, posicionamientos en favor del proteccionismo y exhalaciones viajeras a medias entre encargos oficiales, como su breve y polémica capitanía general en Puerto Rico, visitas al balneario de Vichy para tratar su afección en el hígado y un incesante desfilar por el Viejo Mundo. Esta experiencia en los salones europeos le granjeó desconfianzas en el interior y fama externa, quizá culminada con su papel de observador en los instantes iniciales de la Guerra de Crimea, interrumpido ante el estallido de la 'vicalvarada' en verano de 1854, cuando regresó a España para alinearse con Espartero y O’Donnell, con quien volvería a congeniar durante el periodo de la Unión Liberal, cuando alcanzó varias cumbres antes de despeñarse al discrepar del rumbo tomado por la monarquía.

Ese lustro junto a O’Donnell le resarció hasta transformarlo en un héroe popular por sus proezas durante la guerra de Marruecos entre otoño de 1859 y la primavera de 1860. Sus intervenciones en las batallas de Tetuán y Castillejos le concedieron, además del marquesado y el rango de grande de España, la confirmación en el nombramiento para luchar en México junto a ingleses y franceses en pos de vengar la expulsión del embajador patrio y el impago de la deuda.

Estatua de Prim en Barcelona 
Fue el inspirador de la revolución de 1868 en septiembre de 1868, en Cádiz, juntamente con los generales Dulce, Serrano y Topete firma el bando de la proclama revolucionaria. El presidente del gobierno Ramón M. Narváez y su primer ministro, González Bravo abandonaron a la reina, y gran parte del ejercito desertó para pasarse al bando revolucionario. Se marca el comienzo de un periodo febril llamado el "Sexenio democrático" (1868-1874). Posteriormente se piensa en cumplir el dictado de la Constitución. El principio monárquico contemplado que excluye a los Borbones lo que implica la búsqueda de un nuevo rey. Nombrado por el regente general Serrano como Presidente del gobierno en 1869, Se dedicó a buscar un rey para España y encontró en Amadeo de Saboya la persona que sería elegido rey en el mes de noviembre de 1870. Solo puede pasar en España que sea elegido un rey por votación en un parlamento. Pero así fue. Y como siempre hasta en eso España es diferente, y el rey no tuvo apoyos de casi nadie, ni de la derecha ni de la izquierda ni de su padre. Es más, antes de ser proclamado rey, fue al velatorio de su protector asesinado.

España tiene demasiada desidia con su pasado. Juan Prim podría ser uno de sus ejemplos supremos, y tampoco es necesario ir a nuestro tiempo para corroborarlo. En 1936, la FAI eliminó su estatua ecuestre del Parque de la Ciudadela de Barcelona, antaño fortaleza de oprobio, cedida a la Ciudad Condal por el general más joven de Europa después de Napoleón, en 1868, tras la Gloriosa. La removieron desde el odio a cualquier signo de poder, sin considerar cómo el conde de Reus propició con su trayectoria el camino hacia un país más moderno, despojado pese a todas sus limitaciones de lastres anclados en el Antiguo Régimen.

El asesinato de Prim sigue siendo un enigma, por esclarecer no los hechos en si mismo, sino la autoría, la orden de asesinarlo. En la calle del Turco, hoy Marqués de Cubas, en su honor, le dispararon desde cerca dos grupos de hombres. El cochero pudo salir a toda prisa y llevarlo hasta su casa. Cuando llegó a su dormitorio, Prim había perdido mucha sangre. Se le aplicaron las primeras curas y el general solo pudo decir: “Veo la muerte...”. Luego, al ser preguntado por los ejecutores desatentado, añadió: “No lo sé, pero no me matan los republicanos”.  Un cuarto de hora más tarde llegaron Serrano y el almirante Topete. Agonizando, Prim solicitó del primero que encargara a Topete la presidencia interina del gobierno hasta la llegada del rey. Para tranquilizar a la población, rogó que se expidiera un primer parte que solo mencionase que había resultado herido. Los daños eran mayores de lo que se había supuesto. Dos días después, el general murió. Se especula que ya estaba muerto y no quisieron dar la noticia al pueblo por oscuros intereses. Queda la duda.  La pregunta saltó a la calle: ¿quiénes habían sido los asesinos?  Por una parte, los republicanos; por otra, los oscuros manejos de Montpensier o, por qué no, los de algún partidario del joven príncipe Alfonso, contrariado por la posibilidad de ver en el trono de España a un monarca de una dinastía que no fuera la Borbón.

La autopsia judicial se practicó a las 11.30 horas del día 31 de diciembre, siendo embalsamando su cuerpo a mediodía, de forma que las 15 horas quedaba expuesto en el palacio de Buena-Vista. Apresuradas operaciones todas ellas, recogida 1 por la prensa del día siguiente . Resulta evidente que desde el principio se quiso restar importancia a la gravedad de las lesiones, previsiblemente para evitar la alarma social y política, a pesar de que los médicos que le asistieron tras el atentado ya se referían a las heridas como “lesiones graves y pueden ser peligrosas por la índole especial de las mismas heridas”. “Descartadas otras lesiones violentas distintas a las heridas por arma de fuego, cabe atribuir la muerte a su complicación infecciosa de éstas, como hasta ahora todas las fuentes han venido recogiendo. Afirmación por otra parte coherente con la naturaleza de las heridas y su fácil infección, junto a la falta de medidas higiénicas e inexistencia de la antibioterapia entre otros”.  Por otra parte el Dr. José Simón, encargado del embalsamamiento, dejaba inscrito en la tapa del ataúd “embalsamado el 1º de enero”, fecha que debe referirse al último retoque antes de ser trasladado a la Basílica de Atocha

 

jueves, 8 de mayo de 2025

INGENIERIA ROMANA - ACUEDUCTOS

La grandeza del Imperio Romano crecía proporcionalmente al volumen de agua que entraba en él. Para establecerse era necesario dotar a las ciudades y territorios de su imperio de unas sólidas infraestructuras, algunas de las cuales han llegado en servicio hasta nuestros días.

Idearon, trazaron y mantuvieron una ingente red de acueductos, cisternas y depósitos, con una tecnología punta, para asegurar un satisfactorio suministro. La arquitectura del agua se convirtió en símbolo de la grandeza de Roma y, consecuentemente, también de sus gobernantes y emperadores.
¿Cómo se construyeron los acueductos romanos en Hispania? Tenemos unos cuantos:  
Acueducto de Albarracín-Cella - Aqua Fontis Aureae (Córdoba) - Acueducto Aqua Nova Domitiana Augusta (Córdoba) - Acueducto de Bejís (Castellón)- Caños de Carmona (Sevilla)-Acueducto de les Ferreres (Tarragona)- Acueducto de Gades (Cádiz)- Acueducto de Huelva - Acueducto de los Milagros (Mérida) - Acueducto de Peña Cortada (Valencia)- Acueductos de la rambla de Carcauz (Almería)- Quedan restos del acueducto romano de Altea (Alicante) - Acueducto de Segovia - Acueducto de Sexi-(Granada) - Acueducto de Valdepuentes (Córdoba)
Cuando hablamos de acueductos, tendemos a identificarlos con los grandes puentes sobre arcos sin tener en cuenta que estos son solo la parte monumental de un trazado que puede llegar a superar los cien kilómetros de longitud. Así es en realidad una conducción, etimológicamente “acueducto”.
A través de estas inmensas canalizaciones, el agua llegaba en condiciones de potabilidad a las ciudades para dar servicio primero al ámbito público (fuentes y termas) y después al privado (domicilios).
Estas obras adquieren en ocasiones una complejidad extrema y su realización, incluso hoy y con nuestros medios, sería objeto del máximo esmero y no poca dificultad en su replanteo, de forma que se garantizase su correcto funcionamiento.

Acueducto de Ferreres - Tarragona 
Doscientos cincuenta años tardaron los trabajos de explotación en las Médulas, hasta principios del siglo III, en lo que hoy es El Bierzo. Fueron la mayor mina de oro del Imperio y la construcción de los canales fue el primer paso que permitió extraer oro de la montaña. Fueron una de las obras hidráulicas más extensas del mundo antiguo, y su trazado una obra de ingeniería que ha perdurado 2.000 años. Los canales han sido recuperados como rutas de senderismo y ahora se valora su inclusión dentro del espacio cultural y protegido de este Patrimonio de la Humanidad en 1997. 

Explotación de Las Médulas 
El entorno de las minas de oro romanas es uno de los principales tesoros paisajísticos de El Bierzo. Pero lo que no todo el mundo sabe es que, oculta en las faldas de las montañas que rodean la antigua explotación aurífera, se encuentra una impresionante red de canales de agua que abastecían la mina y que suman más de 600 kilómetros de longitud, algunos de los cuáles se pueden recorrer ahora en itinerarios de montaña.
La red de canales permaneció poco conocida e infravalorada hasta época reciente y su cartografía y estudio detallado no se acometió hasta los primeros años del siglo XXI. Casi enterrados por el paso del tiempo, deformados por los procesos de erosión de las laderas y sepultados bajo un manto de arbustos. Una extensión de más de 600 km. Una de las características que más llama la atención en las observaciones de campo es la pendiente suave y uniforme que presenta el trazado de los canales, que en algunos casos alcanza los 143 km y que se mantiene, con un pequeño margen de error, en torno al 0,2-0,3%. Al mantenerse la pendiente regular a lo largo de muchos kilómetros, el trazado de los canales queda identificado de manera peculiar sobre el terreno. Y es que la construcción del canal se llevaba a cabo desde la explotación hacia el curso de agua y no al revés. Lo que marca la posición es la altura de la mina. Entre diferentes puntos de explotación en Las Médulas existen diferencias de cota de hasta 200 metros.

USO DEL CHOROBATE
Las presas y canales eran infraestructuras para aumentar, mediante el riego, la producción agrícola. Este aporte de agua, que no precisaba potabilidad, comportaba obras no tan aparatosas como las de los acueductos y, por ello, se han conservado en menor medida. La agricultura árabe, por ejemplo, abundó en los mismos parámetros que la romana. Los romanos se sentían muy orgullosos de sus realizaciones en el campo de la ingeniería hidráulica.

Los ríos constituyen un riesgo en el caso de inundaciones, que destruyen cuanto se asienta en sus orillas. Con todo, las inundaciones en Roma fueron frecuentes, intentaron paliarlas mediante canales y otras obras de gran envergadura, que sirvieron, además, para evitar zonas lacustres y pantanosas y facilitar las comunicaciones y el transporte, siempre menos costoso por vía fluvial que por terrestre. Además de las diversas técnicas de pesca, los romanos dispusieron de viveros, tanto para peces de agua salada como de agua dulce.

Los romanos inventaron o perfeccionaron una amplia gama de maquinaria, como cuenta Vitruvio en el libro noveno de su Arquitectura. Y la industria se benefició directa o indirectamente de estos conocimientos.
La fuerza motriz del agua no fue en absoluto menospreciada. Se comprueba en los molinos hidráulicos y en la minería. En las explotaciones auríferas, el caso de Las Médulas (León) es de una gran espectacularidad: la perforación de galerías en el conglomerado de la montaña permitía hacer circular una enorme cantidad de agua, cuya presión provocaba el derrumbe para recuperar el oro del yacimiento. Plinio el Viejo, en su Historia natural, explica con detalle lo que él denomina ruina montium.

Acueducto de Segovia 
Pero no hay que olvidar que los acueductos eran la necesaria estructura para la enorme cantidad de agua que se empleaba en la ornamentación, el lujo y el espectáculo. Las cisternas podían proporcionar el agua para lo más necesario, pero no para tanto derroche y esplendor. No había ciudad que se preciara, por pequeña que fuese, que no contara al menos con unos baños o termas públicas. Su módica entrada daba acceso al común de los mortales, que podían asistir a diario y disfrutar de momentos de relax e intercambio social. Su ingeniería era brillante. La calefacción funcionaba mediante la circulación de aire caliente bajo un pavimento hidráulico, sostenido con pilares de ladrillo, sobre el que se echaba agua fría, dando lugar a una especie de sauna. En los caldaria había también pequeñas piscinas cuya agua se calentaba con el mismo procedimiento.

 Sistema de caldeamiento en una villa romana

Estas obras adquieren en ocasiones una complejidad extrema y su realización, incluso hoy y con nuestros medios, sería objeto del máximo esmero y no poca dificultad en su replanteo, de forma que se garantizase su correcto funcionamiento. El “Chorobate” se trata de una herramienta para la comprobación de niveles del terreno utilizada por los romanos para la construcción de acueductos. En una regla en la cual se horadaba una ranura que se llenaba de agua. En cada extremo de la regla, una plomada permitía comprobar la vertical. Al inclinar la regla, un simple control visual permitía apreciar el nivel del agua en la ranura. Mediante esta observación, era posible deducir la inclinación que debía darse al acueducto para garantizar en la obra la misma inclinación.

Construcción de un acueducto 
El chorobate se equipaba con 2 visores en cada extremidad de la regla. El espacio entre los dos visores definía la precisión de la medida; las reglas tenían en general una longitud de alrededor de 6 metros.
Doscientos cincuenta años tardaron los trabajos de explotación en las Médulas. Fueron la mayor mina de oro del Imperio y la construcción de los canales fue el primer paso que permitió extraer oro de la montaña. Fueron una de las obras hidráulicas más extensas del mundo antiguo, y su trazado una obra de ingeniería que ha perdurado 2.000 años. Los canales han sido recuperados como rutas de senderismo y ahora se valora su inclusión dentro del espacio cultural y protegido de este Patrimonio de la Humanidad en 1997. El entorno de las minas de oro romanas es uno de los principales tesoros paisajísticos de El Bierzo. Pero lo que no todo el mundo sabe es que, oculta en las faldas de las montañas que rodean la antigua explotación aurífera, se encuentra una impresionante red de canales de agua que abastecían la mina y que suman más de 600 kilómetros de longitud, algunos de los cuáles se pueden recorrer ahora en itinerarios de montaña. La red de canales permaneció poco conocida e infravalorada hasta época reciente y su cartografía y estudio detallado no se acometió hasta los primeros años del siglo XXI. Casi enterrados por el paso del tiempo, deformados por los procesos de erosión de las laderas y sepultados bajo un manto de arbustos. Una extensión de más de 600 km. Una de las características que más llama la atención en las observaciones de campo es la pendiente suave y uniforme que presenta el trazado de los canales, que en algunos casos alcanza los 143 km y que se mantiene, con un pequeño margen de error, en torno al 0,2-0,3%. Al mantenerse la pendiente regular a lo largo de muchos kilómetros, el trazado de los canales queda identificado de manera peculiar sobre el terreno. Y es que la construcción del canal se llevaba a cabo desde la explotación hacia el curso de agua y no al revés. Lo que marca la posición es la altura de la mina. Entre diferentes puntos de explotación en Las Médulas existen diferencias de cota de hasta 200 metros.
Para establecerse era necesario dotar a las ciudades y territorios de su imperio de unas sólidas infraestructuras, algunas de las cuales han llegado en servicio hasta nuestros días o han desafiado el paso del tiempo con su masa imponente. En este contexto, es comprensible que el abastecimiento de agua constituyera una temprana y constante preocupación.

miércoles, 7 de mayo de 2025

PREHISTORIA E ÍBEROS EN LA PENÍNSULA

El Paleolítico inferior es la etapa inicial de la Edad de Piedra.
Comenzó hace unos 2,5 millones de años, cuando están datadas las primeras herramientas conocidas, y duró hasta hace unos 125.000 años. En la península ibérica tenemos reproducidos pinturas y grabados que han permitido atestiguar la presencia humana en nuestro suelo. Los restos fósiles humanos más antiguos hallados en la península ibérica se localizan en la sima del   Elefante (yacimientos de Atapuerca, Burgos) en donde se ha localizado una mandíbula de un homínido aún no determinado, con una antigüedad de 1.200.000 años. 

Fósiles de Atapuerca 

De tratarse del Homo Habilis quizá hubiera podido llegar a través del estrecho de Gibraltar; pero otra hipótesis se apoya en la idea de una posible evolución de individuos Homo Erectus que llegaron desde Asia hacia una nueva especie, Homo Antecessor, establecidos en la península ibérica (Gran Dolina, TD6, Atapuerca, Burgos) en torno a los 800.000 años.
Pero del Paleolítico superior, que va desde 40.000 a 10.000 años a.C., sabemos que en la península es en las cuevas de Altamira donde encontramos el ejemplo más representativo, con las pinturas rupestres, que asegura la existencia de grupos humanos. Podemos asegurar que las cuevas fueron utilizadas desde hace unos 35.000 años hasta que fue sellada por un derrumbe hace unos 13.000 años. Tras la desaparición del Hombre de Neandertal nos encontramos únicamente con el Homo Sapiens.
Posteriormente, en el Mesolítico, con un clima más templado se producen cambios en las últimas culturas del paleolítico. Sabemos de las herramientas para la caza y la pesca, abrigos, cavernas y dominio del fuego. Hay sedentarismo y también migraciones debido a la necesidad de cazar y pescar.

Pinturas ruprestes de las Cuevas de Altamira 

Después, en el Neolítico, 6.000 años antes de Cristo ya encontramos una economía basada en la agricultura y la cría de animales para el consumo. Se cambia de una subsistencia depredadora a otra de tipo productivo. Esto desarrollará las primeras aldeas y una incipiente estructura social.
En Atapuerca se han descubierto un antepasado común de los neandertales europeos y del hombre de hoy. Estamos hablando del Homo Sapiens Sapiens. Los Homo Sapiens de Atapuerca tenían afinidades genéticas con Oriente Próximo y Alemania. Son restos fósiles encontrados en este yacimiento, que datan de hace 4.500 años.
La Edad de los Metales se inicia con el Cobre. Abarca todo el III milenio a.C. existieron yacimientos sobre todo en Andalucía. Hacia el 3500 a.C. Algún listo mezcla el estaño y el cobre, y obtiene el bronce, un metal de dureza muy superior a la de cualquier piedra utilizada. La edad del Bronce va desde el 1.700 al 800 a.C. Estos metales sustituyeron paulatinamente al hueso y a la piedra. Como el estaño comenzó a escasear en Oriente Medio obligó a esos pueblos a la búsqueda del metal. Llegaron a la península. Se fabricaban armas y otros utensilios. Hicieron posible la aparición de culturas nuevas y el inicio del megalitismo, otro punto importante es la construcción de megalitos, construcciones arquitectónicas para tumbas, hechas con grandes bloques de piedra escasamente desbastados. Se inicia a partir de finales del Neolítico y dura hasta la Edad del Bronce. 
La cultura del vaso campaniforme es un enigma hoy en día. Hay quien lo considera de procedencia ibérica y de mediados del III milenio a.C. y que se fue extendiendo por Europa. Esto tiene importancia para la conservación de excedentes y para la comercialización. Se trata de vasijas (si las ponemos boca abajo parecen una campana).


CASTILLO DE TORIJA – GUADALAJARA

Es donde ahora se ubica el Centro de Interpretación Turística de Guadalajara. La fortaleza perteneció a la poderosa familia Mendoza quienes ...