La Hispania visigoda fue el crisol donde se fusionó el
germanismo con el legado de la antigüedad.
Hacia el siglo VII los visigodos ya habían abandonado su idioma germánico natal, sustituido por las lenguas romances, aunque algunas palabras españolas son de origen godo.
San Isidoro, arzobispo de Sevilla de 599 a 636 y principal consejero de los reyes visigodos, (hijo de hispano-romano y madre visigoda), recogió en sus voluminosos escritos todo el saber de la época y reforzó el papel de la iglesia como depositaria de la cultura, influyendo decisivamente en el posterior pensamiento de la Edad Media europea.
Hacia el siglo VII los visigodos ya habían abandonado su idioma germánico natal, sustituido por las lenguas romances, aunque algunas palabras españolas son de origen godo.
San Isidoro, arzobispo de Sevilla de 599 a 636 y principal consejero de los reyes visigodos, (hijo de hispano-romano y madre visigoda), recogió en sus voluminosos escritos todo el saber de la época y reforzó el papel de la iglesia como depositaria de la cultura, influyendo decisivamente en el posterior pensamiento de la Edad Media europea.
Fue destituido a traición. Numerosas
conspiraciones amenazaron a sus sucesores. Echaron la culpa del malestar a los
judíos, a los que intentaron convertir al cristianismo o reducir a esclavos. En
las últimas décadas del reino visigodo se decretó la conversión forzosa de los
judíos, que fue seguida de una cruel represión.
Separar la verdad histórica y la leyenda sobre aquellos hechos es complicado. Ni los historiadores se ponen de acuerdo sobre y un sucedido determinado. Pero escogemos la versión más verosímil, o más difundida. Comes Julianus, (Don Julián) era posiblemente un visigodo o bizantino, partidario de Agila II que disputaba el trono visigodo a Rodrigo. Por lo visto Don Julián era el padre de una moza llamada Florinda, que pudo ser ultrajada por Rodrigo. Claro está que el padre se tomó venganza y aquí es donde Don Julián que era seguramente gobernador de la actual ciudad de Ceuta, conjuntamente con el rey visigodo Witiza (hay quien dice que era el padre de Agila II) se confabuló con los musulmanes norteafricanos para que incursionaran en la península. Esto al menos en el 709.
Separar la verdad histórica y la leyenda sobre aquellos hechos es complicado. Ni los historiadores se ponen de acuerdo sobre y un sucedido determinado. Pero escogemos la versión más verosímil, o más difundida. Comes Julianus, (Don Julián) era posiblemente un visigodo o bizantino, partidario de Agila II que disputaba el trono visigodo a Rodrigo. Por lo visto Don Julián era el padre de una moza llamada Florinda, que pudo ser ultrajada por Rodrigo. Claro está que el padre se tomó venganza y aquí es donde Don Julián que era seguramente gobernador de la actual ciudad de Ceuta, conjuntamente con el rey visigodo Witiza (hay quien dice que era el padre de Agila II) se confabuló con los musulmanes norteafricanos para que incursionaran en la península. Esto al menos en el 709.
Los musulmanes calcularon las
posibilidades y las riquezas que podrían obtener para lo que mandaron una
expedición a la península y quedaron maravillados. Por lo que noticiados los
árabes se pusieron a la preparación de invadir la península.
Cuando murió el rey Witiza (710), que intentaba dejar el trono a su hijo, en su lugar, fue proclamado rey Don Rodrigo.
En el año 711 el rey visigodo, don Rodrigo, estaba luchando en el norte y muchos nobles visigodos no le eran fieles. La situación para los musulmanes se mostraba propicia. Hasta tendrían ayuda y las carreteras romanas facilitarían los desplazamientos. Con lo cual se lo tomaron con interés y prepararon la invasión estableciendo acuerdos y consiguiendo apoyos, sobre todo de los judíos, que veían la posibilidad de un mejor trato y conveniencia de negocio que con los cristianos, y sectores sociales visigodos descontentos por los privilegios de las clases altas.
Es posible que hayan sido los barcos de don Julián los que ayudaron a cruzar el estrecho a las fuerzas invasoras. Entraron por Gibraltar, con un ejército de 12.000 hombres, la mayoría bereberes, (etnia islámica del norte de África), y desembarcaron a las órdenes de Tariq-ibn Ziyad que era el gobernador de Tánger.
Cuando murió el rey Witiza (710), que intentaba dejar el trono a su hijo, en su lugar, fue proclamado rey Don Rodrigo.
En el año 711 el rey visigodo, don Rodrigo, estaba luchando en el norte y muchos nobles visigodos no le eran fieles. La situación para los musulmanes se mostraba propicia. Hasta tendrían ayuda y las carreteras romanas facilitarían los desplazamientos. Con lo cual se lo tomaron con interés y prepararon la invasión estableciendo acuerdos y consiguiendo apoyos, sobre todo de los judíos, que veían la posibilidad de un mejor trato y conveniencia de negocio que con los cristianos, y sectores sociales visigodos descontentos por los privilegios de las clases altas.
Es posible que hayan sido los barcos de don Julián los que ayudaron a cruzar el estrecho a las fuerzas invasoras. Entraron por Gibraltar, con un ejército de 12.000 hombres, la mayoría bereberes, (etnia islámica del norte de África), y desembarcaron a las órdenes de Tariq-ibn Ziyad que era el gobernador de Tánger.
De forma y manera
que cuando el rey Rodrigo llegó con su ejército en plan a ver qué diablos está
pasando aquí, era tarde y en la batalla famosa batalla cerca del río Guadalete,
del cual toma su nombre dicha batalla, allí perdió Rodrigo la batalla y la
vida.
El consiguiente vacío de poder facilitó la conquista de casi todo el territorio peninsular, llegando puntualmente las tropas musulmanas en su expansión hasta más allá de los Pirineos, seguramente Poitiers donde fueron vencidos por Carlos Martel, (abuelo de Carlomagno), en el 732.
El reino visigodo se extinguió completamente, aunque inspiró a los nobles, luego reyes de Asturias y León la posibilidad de sentirse herederos del reino visigodo, juntamente con la defensa de la religión cristiana.
Como curiosidad diremos que los historiadores consideran que la Monarquía en España apareció hace 1.600 años, cuando se instaló el Rey Ataúlfo, primer Rey visigodo, en 415 en la provincia romana Tarraconense según señala la casa del rey.
El consiguiente vacío de poder facilitó la conquista de casi todo el territorio peninsular, llegando puntualmente las tropas musulmanas en su expansión hasta más allá de los Pirineos, seguramente Poitiers donde fueron vencidos por Carlos Martel, (abuelo de Carlomagno), en el 732.
El reino visigodo se extinguió completamente, aunque inspiró a los nobles, luego reyes de Asturias y León la posibilidad de sentirse herederos del reino visigodo, juntamente con la defensa de la religión cristiana.
Como curiosidad diremos que los historiadores consideran que la Monarquía en España apareció hace 1.600 años, cuando se instaló el Rey Ataúlfo, primer Rey visigodo, en 415 en la provincia romana Tarraconense según señala la casa del rey.
ATAULFO
Al desplomarse el reino visigodo se creó una nueva entidad política, Al-Andalus. No obstante los hispano-romanos e hispano-visigodos, (hay que tener en cuenta que los visigodos llevaban en la Península casi 250 años, por lo tanto es lógico que se hayan mezclado con los hispano-romanos), que componían la población de la península, todos cristianos, a la vez que se desarrolló al-Andalus, fueron creando núcleos de resistencia a los musulmanes, primero en el norte y luego irán avanzando y creando lugar a los reinos cristianos medievales, que son los que se encargarán de hacer frente al musulmán, recuperar territorio al cristianismo o someterlos de alguna forma.
En la franja norte de la península, desde las actuales Galicia a Cataluña, grupos armados combatían a los musulmanes. Operaban sobre todo en la zona cantábrica y eran insumisos a cualquier gobierno desde la época romana, estaban apenas controlados por los visigodos. Aunque se presentan estos hechos como el principio de la Reconquista, más bien parece una continuación de la actitud habitual de los montañeses. Si bien esos reinos cristianos no existían entes de la invasión musulmana, por lo tanto se trataba de avanzar por el territorio de la península, recuperando para la cristiandad los pueblos sometidos, o bien expulsar o conseguir una debilidad que produjera impuestos que los musulmanes debían pagar. Está claro que si ahora no había un rey cristiano con los visigodos, tendría que haberlo escogiendo entre los nobles de la población existente ante de la llegada de los agarenos. Pero no todos los visigodos estaban vencidos. En las actuales Cataluña, Aragón y Septimania estaban, como el resto de la península habitada por hispanogodos.
Pero el Imperio Romano de Occidente existía todavía, con capital a veces en Roma y otras en Rávena. Al Imperio Bizantino se le llamó el Imperio Romano de Oriente. En esa zona estaba establecida la lengua griega, por lo que se considera un imperio griego aliado de Roma.
Al desplomarse el reino visigodo se creó una nueva entidad política, Al-Andalus. No obstante los hispano-romanos e hispano-visigodos, (hay que tener en cuenta que los visigodos llevaban en la Península casi 250 años, por lo tanto es lógico que se hayan mezclado con los hispano-romanos), que componían la población de la península, todos cristianos, a la vez que se desarrolló al-Andalus, fueron creando núcleos de resistencia a los musulmanes, primero en el norte y luego irán avanzando y creando lugar a los reinos cristianos medievales, que son los que se encargarán de hacer frente al musulmán, recuperar territorio al cristianismo o someterlos de alguna forma.
En la franja norte de la península, desde las actuales Galicia a Cataluña, grupos armados combatían a los musulmanes. Operaban sobre todo en la zona cantábrica y eran insumisos a cualquier gobierno desde la época romana, estaban apenas controlados por los visigodos. Aunque se presentan estos hechos como el principio de la Reconquista, más bien parece una continuación de la actitud habitual de los montañeses. Si bien esos reinos cristianos no existían entes de la invasión musulmana, por lo tanto se trataba de avanzar por el territorio de la península, recuperando para la cristiandad los pueblos sometidos, o bien expulsar o conseguir una debilidad que produjera impuestos que los musulmanes debían pagar. Está claro que si ahora no había un rey cristiano con los visigodos, tendría que haberlo escogiendo entre los nobles de la población existente ante de la llegada de los agarenos. Pero no todos los visigodos estaban vencidos. En las actuales Cataluña, Aragón y Septimania estaban, como el resto de la península habitada por hispanogodos.
Pero el Imperio Romano de Occidente existía todavía, con capital a veces en Roma y otras en Rávena. Al Imperio Bizantino se le llamó el Imperio Romano de Oriente. En esa zona estaba establecida la lengua griega, por lo que se considera un imperio griego aliado de Roma.